Más del 80% del departamento de Chocó se encuentra en situación crítica debido a la ola invernal, según informó el Gobierno departamental. La emergencia por las intensas lluvias ya impactó a 27 de los 31 municipios de este, en el que están afectados 188.035 personas de 37.607 familias, según datos de la Gobernación. Las autoridades locales indicaron que hasta el momento solo se logró asistir a cerca del 5% de la población afectada, lo que representa alrededor de 2.000 familias, y se solicitó el apoyo del Gobierno nacional para atender la crisis.
El Clan del Golfo, una de las bandas criminales que hay en Colombia, por medio de redes sociales mostró preocupación por las difíciles condiciones de sobrevivencia que enfrentan miles de familias chocoanas debido a esta problemática. Sin embargo, lo que más causó controversia es que dio a conocer un gesto de solidaridad hacia las comunidades más desamparadas del departamento.
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Al respecto, la comunidad reaccionó con indignación y fuertes cuestionamientos ante la cooperación ofrecida por la organización, en especial, porque no se precisó todavía en qué municipios se harían efectivas las ayudas, ni cuándo. La controversia aumentó cuando el mismo Clan del Golfo criticó el paro armado anunciado por el ELN en la región.
En el comunicado, el grupo ilegal señaló que el llamado corredor humanitario anunciado es, supuestamente, una estrategia para “aprovisionarse de armas y logística”. Según la organización, esta iniciativa no estaría en realidad enfocada en llevar ayudas a las regiones afectadas.
Hasta el momento, ni la fuerza pública ni la Gobernación de Chocó se pronunciaron sobre las presuntas ayudas humanitarias que el Clan del Golfo asegura ofrecer a los municipios afectados por la ola invernal y el paro armado en el departamento.
Las autoridades enviaron cinco toneladas de ayuda a Bojayá, que es el municipio más afectado por la emergencia. El 10 de noviembre de 2024, se decretó la calamidad pública ante la gravedad de los daños causados por las inundaciones, una situación que superó la capacidad de respuesta de la Alcaldía.
Por su parte, el alcalde Hailton Perea Chaverra hizo un llamado urgente al Gobierno nacional y a todos aquellos que puedan brindar apoyo para enfrentar la emergencia en este municipio. “Las inundaciones han devastado hogares, escuelas, cultivos y vidas, dejando a comunidades enteras con absolutamente nada. El municipio está agotado, y nuestros recursos no alcanzan para cubrir las necesidades de todos”, aseguró el mandatario local.
“En 64 comunidades, entre veredas y corregimientos de la zona norte, sur y zona centro, familias afro, 1.791 y 1.618 familias indígenas damnificadas; el sector agropecuario tiene un total de 2.800 productores con pérdidas en sus cultivos y 10.000 hectáreas de cultivos afectados entre plátano, maíz, arroz, yuca y borojó. También se tuvo pérdida de animales de corral y ganado”, se lee en el reporte de la Alcaldía.
El alcalde destacó que Bojayá es un municipio de categoría seis, lo que implica una limitada disponibilidad de recursos para hacer frente a una emergencia de esta magnitud. La gobernadora del Chocó, Nubia Carolina Córdoba, señaló que el departamento está recibiendo donaciones para ayudar a las comunidades afectadas por la emergencia. “Hoy queremos recordarles que cada donación, por pequeña que parezca, puede marcar una gran diferencia en la vida de miles de familias que enfrentan esta emergencia. El Chocó nos necesita”, señaló.
Córdoba añadió que un corredor humanitario no es suficiente. Lamentó que “la decisión del ELN de mantener el paro armado también mantiene a miles de personas en estado de confinamiento, y limita el aprovisionamiento y la prestación de servicios esenciales que hoy se necesitan mucho más por cuenta de la emergencia invernal. Es inhumano lo que tienen que vivir las comunidades del río San Juan”.