Aunque las cifras de Ecopetrol y del Gobierno de Gustavo Petro indican que Colombia no enfrenta una crisis de suministro inminente de gas, aún existen diferencias en torno al nivel de déficit proyectado para los próximos años. Las soluciones propuestas, que incluyen ampliaciones de infraestructura e posibles importaciones, son un intento de asegurar la confiabilidad energética según las inevitables fluctuaciones en la demanda y el consumo de este servicio.
Sin embargo, ante la situación de cara a final de 2024 y lo que puede pasar en 2025, el Congreso de la República tomó cartas en el asunto y citó al presidente de Ecopetrol, Ricardo Roa, y al ministro de Minas y Energía, Andrés Camacho, a debate de control político en la Comisión Quinta de la Cámara de Representantes. En esta, abordaron la situación del suministro de gas en Colombia y destacaron los retos y planes de acción necesarios para garantizar la estabilidad energética en el país.
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Durante la cita, ofrecieron un panorama sobre cómo el país enfrentará el suministro de gas en los próximos años.
“Hoy tenemos para vender, el 1 de diciembre, 16 gigas (GBTUD) de gas disponible”, explicó el presidente de Ecopetrol al referirse a los excedentes listos para la venta. Sin embargo, Roa aclaró que esta disponibilidad de gas es temporal y solo cubre un mes, por lo que no representa una solución a largo plazo.
Previsiones para 2025
Las previsiones para 2025 muestran un panorama mixto. El alto ejecutivo mencionó que, aunque el país enfrenta potencial un déficit, se hacen esfuerzos importantes para contrarrestar este problema mediante un proceso de reequilibrio del consumo de gas. “Con la capacidad de importación actual y las cantidades de gas disponibles, el país no necesitará más gas para el próximo año, a excepción de la demanda térmica”, declaró el presidente de la estatal petrolera.
Por otro lado, Andrés Camacho agregó que el Gestor del Mercado pronostica que, en el peor de los casos, el déficit en 2025 será de 36 GBTUD, lo que representará menos del 5% de la demanda nacional. Sin embargo, en un escenario optimista, podría haber incluso un excedente de 18 GBTUD. “No estamos hablando de ninguna crisis de gas”, afirmó el ministro.
De igual manera, el ministro expuso que “ni durante el fenómeno de El Niño hubo racionamiento, ni durante el mantenimiento de la regasificadora; no vamos a tener racionamiento, porque ese es el trabajo y la obligación que tenemos como gobierno nacional para con el país”.
Desarrollo de infraestructura
Un aspecto clave para contrarrestar el déficit de gas es el desarrollo de infraestructura. Roa anunció que Ecopetrol está explorando la creación de una plataforma de regasificación en Chuchupa que estaría operativa en cuestión de meses, con capacidad para procesar entre 50 y 100 GBTUD.
Asimismo, el funcionario dijo que “estamos revisando esas otras opciones por el mar Caribe y Buenaventura”, a la espera de confirmar dos o tres proyectos para diciembre. A largo plazo, se prevé que Colombia necesite reforzar el abastecimiento de gas por medio de importaciones adicionales.
Advertencia de los gremios
Sin embargo, la presidenta de la Asociación Colombiana de Gas Natural (Naturgas), Luz Stella Murgas, había entregado un panorama distinto. A pesar de lo dicho ahora por los funcionarios, la dirigente alertó sobre un posible déficit del 7% de la demanda en 2025, con lo que se aumentaría hasta un 30% para 2026, según proyecciones del Gestor del Mercado de Gas.
Para abordar estos desafíos, el ministro Camacho sugirió la posibilidad de utilizar el gasoducto existente con Venezuela, por lo que reconoció que esta opción vendría acompañada de desafíos tanto técnicos como políticos.
“Hay una infraestructura que tenía el país... un gasoducto con Venezuela, que tiene sus complicaciones políticas, técnicas, financieras”, comentó Camacho.