Tras la COP 16, en Colombia se ha comenzado a hablar con mayor propiedad de la necesidad de conservar la biodiversidad y la naturaleza; además, de los impactos que puede generar el cambio climático a corto y largo plazo.
Es por ello que buscando unirse a la lucha para conservar la biodiversidad de Colombia, el grupo L’Oréal ha comenzado a invertir de manera directa en la regeneración de la naturaleza en el territorio nacional con un proyecto de reforestación en Santa Marta.
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Este proyecto es liderado por varias comunidades indígenas (wiwa, kogui y arhuacos) y tiene como objetivo principal la recuperación de 17.500 hectáreas que han sido afectadas por la expansión de plantaciones, la agricultura de altos insumos y el aumento de minería ilegal en la zona.
De acuerdo con la entidad, “el Proyecto Santa Marta contribuirá directamente a la conservación de una de las regiones con mayor biodiversidad del mundo”, para también proporcionar un trabajo significativo a los pobladores de la región.
En diálogo con Infobae Colombia, Nicolás Vanegas, vocero de la región andina de L’Oréal, explicó por qué es importante que cada vez más empresas se unan a este tipo de proyectos.
En primer lugar, Vanegas destacó la relevancia que ha tomado en la actualidad la biodiversidad, la naturaleza y la responsabilidad de las compañías para buscar una plena sostenibilidad.
“Cuando hablamos de medio ambiente, no solamente estamos hablando de lo que vamos a hacer en clima, en el uso del agua, en recursos, sino también estamos hablando, por supuesto, de biodiversidad, y ahí tenemos unos objetivos importantes. No diría que es un tema nuevo, sino que es un tema que ha cobrado más relevancia en la medida que se están dando cuenta las compañías que hay que gestionar de manera responsable”.
De este modo, destacó que en los últimos años se ha consolidado un compromiso por parte de la compañía que consiste en comportamientos que dejarán de tener y otros que están siendo sustituidos de manera constante.
“Se basa en un concepto que se llama límites planetarios, que son básicamente nueve límites que se han establecido por una comunidad científica que permite definir hasta dónde podemos llegar como sociedad. Tenemos que garantizar que nuestra interacción con la naturaleza se hace de manera regenerativa y sostenible, no solo de manera extractiva.
Al profundizar sobre el proyecto de reforestación, destacó que no es el único que tienen vigente en la Latinoamérica, pero sí en el que más se invierte.
“Es un fondo que se creó hace cinco años, tiene una dotación de más de 50 millones de euros y ha sido un vehículo para invertir en cerca de 16 proyectos en todo el mundo. El proyecto de Santa Marta comparte que el 40% de los recursos que se han invertido en total, es un proceso de cerca de 6 años”.
Además, Vanegas mencionó por qué tomaron la decisión de invertir de esa forma en Santa Marta, destacando la riqueza natural que tiene Colombia.
“Estas son tierras que se han degradado por la expansión de plantaciones forestales, por la agricultura de altos insumos, entonces, lo que está buscando es contribuir directamente a conservar una de las regiones con mayor biodiversidad del mundo. No lo hacemos solos, lo hacemos de la mano de ongs internacionales que nos ayudan a viabilizar ese tipo de inversión”.
Por último, el vocero mencionó la importancia del empoderamiento de las comunidades indígenas en la región y pidió que más empresas comprendan que el conocimiento de estas poblaciones es vital.
“Facilita un tema de intercambio de conocimientos y mejores prácticas, las comunidades indígenas tienen un conocimiento ancestral que es muchísimo más profundo y puede garantizar una sostenibilidad de un territorio. Colombia, que es un país tan biodiverso, pero también tiene una gran población indígena, que saben finalmente cuál es su problemática en el día a día, eso permite que uno comparta historias de éxito económico y social”.