Mientras limpiaba su vehículo la noche del lunes, 11 de noviembre, un ciudadano se quedó sorprendido al hacer una pausa y ver que en el cielo, hacia el occidente, flotaba una esfera de luz.
“Estaba limpiando mi vehículo, veo esta esfera en el cielo, pensé que era la luna, pero no”, explicó, al compartir el video de prueba con la plataforma de denuncias ciudadanas Colombia Oscura.
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Durante buena parte de la noche estuvo inmóvil y luego, simplemente, desapareció. Además, el reportero ciudadano decidió enfocarlo y luego voltear la cámara hacia la luna que, entonces, se veía más grande, para demostrar que no se trataba del satélite terrestre.
Un fenómeno que fue reportado en distintos puntos de la ciudad y, en redes, intentaron resolver los bogotanos con toda clase de teorías: “El extraño objeto se llama Venus y es un planeta”, “Parece un dron”, “Eso es un planeta...”, “Confirmo que se veía desde Bosa”, “Incluso en la mañana se veía en Santa Isabel”, “Desde el parque del 20 de julio se veía más cerca”.
Otros avistamientos de ovnis de los que se tiene registro en espacio aéreo colombiano:
Las declaraciones del exoficial de inteligencia estadounidense David Grusch sobre la existencia de “restos biológicos no humanos” en posesión del gobierno de Estados Unidos, tras hallarlos en naves que logran velocidades supersónicas y resisten condiciones extremas, han resonado en Colombia. Este tipo de experiencias, aunque no comprobadas, han sido registradas en varias regiones del país.
En Bogotá, en 1964, un avión T33 de la Fuerza Aérea intentó alcanzar un objeto volador no identificado en el aeropuerto El Dorado. En Tabio, en la Peña de Juaica, límites con Tenjo, se han reportado múltiples encuentros, incluyendo la declaración de un campesino que asegura haber sido abducido en los años 90 por un platillo volador. Además, un piloto habría reportado la presencia de un objeto azul no identificado en la misma zona.
En Cali, residentes cercanos a la base militar han descrito avistamientos de objetos que aparentan ser de otro mundo. En Puerto Salgar, Cundinamarca, se repiten relatos de quienes dicen haber experimentado encuentros cercanos con seres desconocidos. En el Cañón del Chicamocha se halló un objeto circular de color azul y rojo, lo cual ha convertido este sitio en un destino especial para entusiastas de los ovnis.
Por otro lado, el Desierto de la Tatacoa es considerado por algunos creyentes como un lugar de acceso para naves espaciales, mientras que en el corregimiento de Guasimal, en El Zarzal, se rumorea que seres con características humanas de origen extraterrestre habitan entre los locales.
En Anolaima, habitantes recuerdan el caso de Arcesio Bermúdez, quien falleció días después de perseguir junto a varios niños una luz brillante en el cielo.
Según Germán Puerta, director del Planetario de Bogotá, las observaciones de objetos desconocidos son comunes, pero concluye que suelen tratarse de fenómenos astronómicos, meteorológicos o artefactos artificiales como drones y satélites, como explicó a El Tiempo.
También en Bogotá, ocurrió un supuesto avistamiento de ángeles:
La noche del 31 de mayo, Luz Astrid Barrios observó un fenómeno inusual desde su ventana cerca de la calle 124: varios rayos de luz se desplazaban en el cielo, captando de inmediato su atención. “Creo que son varios, por eso me llamó la atención. Es que mire, son tres o cuatro los que yo veo moviéndose”, comentó mientras registraba la escena con la cámara de su teléfono.
Intrigada por el fenómeno, Barrios comenzó a especular sobre su origen y, influida por sus creencias católicas, sugirió que podrían ser ángeles. “¿Qué será? Tiene como una luz, es como si estuvieran volando, ¿sí o no?”, dijo, dejando abierta la posibilidad de una explicación divina y expresando su sorpresa: “¿Eso qué será, mi Dios?”.
En busca de respuestas, Barrios compartió el video en sus redes sociales, donde sus seguidores se unieron a la conversación. En los comentarios, muchos coincidieron en que la extraña luminiscencia provenía de un reflector de luz, ofreciendo una explicación lógica al misterioso espectáculo.