“¿De qué me voy a arrepentir?”: Polo Polo no reculó tras botar a la basura botas que simbolizaron los ‘falsos positivos’

El representante a la Cámara Miguel Polo Polo volvió a ser centro de atención por un polémico gesto que suscitó tanto indignación como debate en redes sociales, puesto que, a través de un video difundido en su cuenta en X, el congresista mostró cómo retira una instalación artística y conmemorativa del colectivo Madres de Falsos Positivos de Colombia (Mafapo), que exhibía botas en la Plaza Núñez del Congreso como símbolo de denuncia por las ejecuciones extrajudiciales ocurridas en Colombia, comúnmente conocidas como “falsos positivos”.

El congresista justificó sus acciones al considerar que la muestra artística es una “instrumentalización política” en respaldo al presidente Gustavo Petro.

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Según declaraciones ofrecidas por Polo Polo a la revista Semana, las botas colocadas en el Congreso no eran más que un acto de “politiquería” en respaldo al mandatario: “Estas mujeres colocaron las botas allí en apoyo a Gustavo Petro”, señaló, refiriéndose a una reciente polémica que involucra al presidente y al ciclista Rigoberto Urán.

“Entonces, apoyan al guerrillero Petro, instrumentalizando a sus hijos muertos— si es que lo están—, y dicen que el Estado es asesino, pero no se acuerdan de los crímenes del otro lado. Ellas están politizando las muertes de sus hijos”, señaló el representante a la Cámara a la revista en mención.

Polo Polo explicó que, en su opinión, Petro empleó la tragedia de los ‘falsos positivos’ como un arma política, bajo el argumento de que la exhibición de las botas responde a esta misma estrategia, y cuestionó si, al igual que supuestamente ocurrió en el caso de Urán, alguien habría “pagado” a Mafapo para llevar a cabo la manifestación.

El representante fue especialmente crítico del número de 6.402 falsos positivos, cifra que es ampliamente reconocida en el país y en organismos internacionales, tras la divulgación de varios informes de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). En sus declaraciones para la fuente citada, Polo Polo reiteró su escepticismo respecto a esta estadística, argumentando que “ni la Fiscalía ni la JEP han dado esa información (...) si tienen 500 nombres, denlos a conocer; si tienen 300, revélenlos”, instó el representante, que cuestiona la veracidad de este dato emblemático en la memoria del conflicto colombiano.

El incidente generó una ola de reacciones, y organizaciones de derechos humanos y colectivos de víctimas condenaron la actitud de Polo Polo, que consideran un acto irrespetuoso hacia las familias afectadas por los falsos positivos. Ante estos señalamientos, el congresista expresó que no se arrepiente de lo que considera una “limpieza” simbólica del Congreso.

Como defensa a sus actos, el político de oposición señaló que no había razón alguna por la que tuviera que arrepentirse: “¿De qué? ¿De botar unas botas al canasto de la basura? ¿De qué me voy a arrepentir? ¿Cuál es el delito? No he matado a nadie. Quienes tienen que arrepentirse aquí son otros”

“Si limpiar la Plaza Núñez es un delito, entonces que me metan preso”, afirmó Polo Polo en respuesta a los cuestionamientos públicos y a una eventual denuncia interpuesta por Mafapo.

En cuanto a las implicaciones legales, el congresista señaló que cuenta con un equipo de abogados preparados para enfrentar cualquier proceso.

“Gracias a Dios tengo un equipo de abogados fuerte que está dispuesto a defenderme. Eso no me preocupa, gracias a Dios”, afirmó con seguridad; sin embargo, el incidente escaló hasta el punto de provocar reacciones de otros sectores políticos.

Por ejemplo, el senador Iván Cepeda, conocido por su activismo en derechos humanos y su defensa de las víctimas del conflicto, calificó de “indignante” el acto de Polo Polo, alegando que es una falta de respeto hacia las madres de Soacha y las víctimas de crímenes de Estado.