El presidente Gustavo Petro insistió en la necesidad urgente de implementar obras de recolección de aguas lluvias en Bogotá con el fin de prevenir un posible agravamiento en el racionamiento de agua que se prevé para 2025, cuando la sequía podría intensificarse. En su cuenta oficial en X, el mandatario subrayó la importancia de impulsar un “movimiento popular” que se enfoque en desarrollar esta infraestructura, con el respaldo financiero de la nación.
“Hay que desatar un movimiento popular en Bogotá para construir la infraestructura de recolección de aguas lluvias. La financiación puede salir de la nación Habría que realizar contratos de mejoramiento de vivienda con albañiles, pequeñas empresas de construcción y juntas de acción comunal y asociaciones de edificios”, señaló el primer mandatario haciendo referencia a una propuesta que, días antes, había dado a conocer.
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La propuesta ha contado con el apoyo del Ministerio de Ambiente y ya había sido mencionada por Petro desde el pasado mes de octubre, tras una reunión en la Casa de Nariño con el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán. Sin embargo, su implementación enfrenta un obstáculo significativo: la necesidad de declarar una situación de desastre. Esta medida ha sido rechazada tanto por el alcalde mayor como por la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), que consideran que no es necesario un decreto de tal naturaleza para abordar la situación actual.
Según el presidente Petro, la ejecución del proyecto de recolección de aguas lluvias se realizaría mediante la contratación de albañiles, pequeñas empresas de construcción y, especialmente, a través de las juntas de acción comunal en distintos barrios de la capital. El objetivo sería mejorar viviendas y adaptar sus techos para captar el agua de lluvia. Bogotá ha estado enfrentando un racionamiento de agua desde mayo, lo que aumenta la urgencia de estas iniciativas.
El jefe de Estado ha sido un firme defensor de la participación de las juntas de acción comunal en proyectos de infraestructura comunitaria. No obstante, la Corte Constitucional ha limitado esta modalidad de contratación en condiciones normales, argumentando que no garantiza la transparencia necesaria. Sin embargo, bajo un decreto de emergencia por desastre, estas restricciones podrían ser levantadas, lo que permitiría avanzar en la propuesta presidencial.
Por ahora, la ciudad sigue enfrentando un complejo panorama ante el riesgo de escasez hídrica, mientras el debate sobre las acciones más efectivas para contrarrestar esta situación continúa abierto entre el gobierno nacional y la administración distrital.
No es una propuesta nueva
Desde inicios de octubre, cuando nuevamente en Bogotá los ciudadanos volvieron a padecer por la escasez de agua por la sequía del tercer trimestre, Petro le aconsejó al alcalde Mayor, Carlos Fernando Galán, implementar este tipo de iniciativas para aprovechar el agua de las lluvias en la ciudad.
“Es importante que los habitantes de Bogotá y la Sabana, además, las ciudades y regiones con stress hídrico, hagan uso, al máximo, de la recolección y uso de aguas lluvias (sic)”, trinó en esa ocasión.
El presidente planteó que los ciudadanos podían beneficiarse de las precipitaciones si realizaban algunas modificaciones en sus viviendas para almacenar el líquido.
“Comunidades de edificios, barrios y hogares pueden hacer modificaciones locativas para recoger aguas lluvias de manera mucho más permanente (sic)”, aseveró en esa ocasión.
Alcalde Galán solicitó a los ciudadanos no arrojar basura a los desagües para prevenir inundaciones
Durante una transmisión en su cuenta de X, el alcalde Galán hizo un llamado a los habitantes para que eviten arrojar basura en las calles, ya que esto contribuye significativamente a los problemas de inundación. El alcalde subrayó que, a pesar de los esfuerzos de limpieza, la basura reaparece rápidamente, lo que agrava la situación.
Desde el Puesto de Mando Unificado (PMU), Galán informó que cerca de 185 personas están trabajando en el norte de Bogotá y en otras áreas para limpiar y mantener los vallados y puntos de conexión de los humedales. Estas acciones son parte de una respuesta a las lluvias que se presentaron el 9 de noviembre de 2024 en varios puntos de la ciudad. Equipos especializados han sido desplegados para atender las emergencias y asegurar que las vías, calles y sumideros se mantengan despejados.
Por su parte, Guillermo Escobar Castro, director del Instituto Distrital de Gestión de Riesgos y Cambio Climático (IDIGER), aseguró que todas las zonas afectadas están siendo monitoreadas. Escobar aprovechó la oportunidad para recomendar a los ciudadanos que eviten arrojar basura, especialmente en edificaciones con sótanos, para prevenir mayores complicaciones.