El cruce de declaraciones entre la fiscal Angélica María Monsalve Gaviriay el expresidente Álvaro Uribe Vélez, por el caso de Santiago Uribe, abrió una nueva controversia en el ámbito judicial y político colombiano. La abogada expresó públicamente su desacuerdo con la demora del juez Jaime Herrera Niño en dictar sentencia en el proceso contra el hermano del líder del partido Centro Democrático.
Cabe señalar que, Monsalve es una fiscal colombiana envuelta en controversias por su trabajo en casos de corrupción. Su visibilidad creció en 2022 al denunciar un traslado que, según ella, buscaba detener una investigación contra empresarios. La abogada, que criticó públicamente al sistema judicial, también enfrenta acusaciones por supuesta solicitud de dinero a cambio de archivar un caso, lo que generó gran polémica en su carrera.
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Así, la abogada, reconocida por sus posturas controvertidas, no dudó en comentar en X sobre el proceso en contra de Santiago Uribe, hermano del expresidente Álvaro Uribe, vinculado al grupo paramilitar “Los 12 apóstoles”. Un caso que aún no cuenta con sentencia; o mejor dicho: no contaba, ya que esta está lista para notificación.
De esta manera, en su declaración, dirigida al presidente de la Comisión Nacional de Disciplina Judicial (Cndj), Monsalve preguntó: “¿Para cuándo el video suyo, anunciando la compulsa de copias contra el juez 1ero Penal de Circuito Especializado de Antioquia (…) por no cumplir con su deber funcional de emitir SENTENCIA en los términos de ley? (sic)”. La fiscal insinuó que podría estarse convirtiendo en blanco de persecuciones por sus críticas hacia los procesos judiciales relacionados con el exmandatario y su familia.
La crítica de Monsalve ocurrió luego de ocho horas de que Uribe publicara un extenso video en redes sociales, en el cual defendía a su hermano Santiago Uribe y cuestionaba el proceso judicial en su contra. En el clip, el expresidente acusó a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) y a sectores de la izquierda de manipular el caso con fines políticos, al sugerir una “conspiración” que implicaba al mayor retirado de la Policía Juan Carlos Meneses y al sacerdote jesuita Javier Giraldo, que, según el expresidente, habrían construido falsos testimonios.
“El mayor Meneses, como parte de su conspiración, hizo uso de su actividad criminal para vincular a Santiago. El protagonista de la reyerta reconoció su crimen, incluso bajo juramento durante el juicio, y por ello está condenado con decisión en firme. Esto refleja y evidencia, como prueba adicional, el complot que se montó contra Santiago Uribe Vélez únicamente por ser mi hermano”, dijo el expresidente.
Según Uribe, el caso contra su hermano, inicialmente archivado en los años 90 y 2000, fue reabierto en 2010 gracias a testimonios que, afirma, fueron influenciados y financiados para perjudicar a su familia. El expresidente destacó que su hermano fue absuelto en dos ocasiones previas por tribunales regionales, y cuestionó la credibilidad de testimonios que lo vinculan con el homicidio del conductor de buses escalera, Camilo Barrientos.
Uribe sostiene que dicho asesinato habría sido resultado de una riña entre el conductor y un policía, sin relación alguna con Santiago Uribe.
“Como punto final, debe anotarse que estos casos son anteriores a mi ejercicio como gobernador de Antioquia”, mencionó el ex jefe de Estado.
Monsalve, por su parte, sostiene que la dilación en el proceso de Santiago Uribe representa una violación a los tiempos judiciales establecidos, y responsabiliza al juez Herrera Niño de no cumplir con su “deber funcional”. En su crítica a la Cndj, enfatizó: “¿De qué justicia hablan ustedes?”, al sugerir que ciertas decisiones judiciales podrían estar influenciadas por factores externos que interfieren en la imparcialidad del proceso.
Las palabras de la fiscal Monsalve resonaron fuertemente en el contexto de un sistema judicial colombiano cada vez más dividido y cuestionado, pero sobre todo en los usuarios de las redes sociales, ya que la situación reveló una tensión entre las diferentes facciones dentro del sistema judicial y entre aquellos sectores que han mostrado históricas diferencias ideológicas con Uribe y su entorno.