Julián Andrés Quintero, un destacado médico cirujano cardiovascular, fue asesinado en un ataque armado mientras se desplazaba por la vía que conecta Cúcuta con Ocaña, en el departamento de Norte de Santander.
El hecho ocurrió el viernes 8 de noviembre, alrededor de las 5 p. m., cuando Quintero viajaba en compañía de su esposa e hija.
Ahora puede seguirnos en nuestro WhatsApp Channel y en Facebook.
El ataque se produjo en el sector conocido como La Virgen, en el municipio de Sardinata. Según las autoridades, el médico fue interceptado por dos hombres en motocicleta que abrieron fuego contra él, causándole la muerte en el lugar. Su familia resultó ilesa, aunque se encuentran recibiendo apoyo psicosocial, según un comunicado de la Policía Nacional.
El caso está siendo investigado por un equipo especializado de la policía, que busca esclarecer los hechos y capturar a los responsables. Las autoridades han solicitado a la ciudadanía que aporte cualquier información relevante a través de las líneas 123 y 165.
El Hospital Emiro Quintero Cañizares, donde Quintero trabajaba, lamentó profundamente su muerte a través de un comunicado difundido en redes sociales. “Rechazamos los hechos de violencia en los que perdió la vida el médico Julián Andrés Quintero Contreras. Su partida no solo representa una gran pérdida para nuestra institución, sino también para la comunidad de Ocaña y toda la región”, expresó el hospital.
El alcalde de Ocaña, Emiro Cañizares, también condenó el asesinato y pidió al Gobierno nacional reforzar la seguridad en la zona. “Es importante que se garantice la seguridad para las personas que constantemente transitan por este sector”, aseguró el mandatario local, según Alerta Santanderes.
Diversos sectores sociales y civiles han exigido a las autoridades que se esclarezca el crimen y se capture a los responsables. En el hospital donde trabajaba Quintero, sus compañeros le rindieron un homenaje y pidieron justicia por su muerte.
Capturan a mujer implicada en homicidios en el Norte de Santander
Las autoridades de Norte de Santander han logrado un avance significativo en la investigación de varios homicidios ocurridos en Ocaña, gracias a la captura de una mujer de 32 años.
Según informó la Policía Nacional a través de su seccional de investigación criminal, la detenida está acusada de participar en tres asesinatos y dos intentos de homicidio, todos bajo la modalidad de sicariato, que tuvieron lugar en diciembre de 2023.
La investigación, que se extendió por cerca de diez meses, incluyó el análisis de más de doscientas horas de grabaciones de cámaras de vigilancia, así como una serie de operativos y allanamientos que permitieron reunir pruebas suficientes para acusar a la mujer. Los crímenes se llevaron a cabo en diferentes sectores de Ocaña: el parque Los Seguros, el barrio Cristo Rey y una zona conocida como El Mercado.
Durante las pesquisas, las autoridades incautaron una pistola y un revólver, los cuales, tras un cotejo balístico, se confirmó que estaban vinculados a los homicidios investigados. Además, se decomisaron equipos tecnológicos, como computadoras y celulares, y agendas con información que podría evidenciar la participación de la detenida en estos crímenes.
La captura de la mujer no solo representa un paso importante en la resolución de estos casos, sino que subraya la complejidad de las redes delictivas en la región, donde las viviendas son utilizadas como refugios para los autores de estos actos violentos. La Policía Nacional continúa con sus esfuerzos para desmantelar estas estructuras criminales y llevar a los responsables ante la justicia.
El 1 de diciembre, un ataque en el parque Santa Ana resultó en la muerte de Yair Shahal Carrascal Rojas, conocido como alias Shajal, de 31 años. Dos hombres en motocicleta dispararon contra él, provocando su muerte inmediata. Este fue el primer incidente de una serie de actos violentos que alarmaron a las autoridades locales.
Horas después del asesinato de Shajal, otro ataque ocurrió en la calle 7 con carrera 14B, en el sector El Mercado. César Julio Cruz Sánchez fue atacado por dos hombres en motocicleta mientras intentaba refugiarse en un billar cercano. A pesar de recibir múltiples disparos, Cruz Sánchez sobrevivió y su testimonio fue fundamental para el desarrollo de la investigación, según el informe policial.
La Sijín de la Policía de Norte de Santander comenzó a recopilar videos de seguridad de ambos sitios, buscando patrones que pudieran vincular los ataques. Las similitudes en el modus operandi y la forma de huir de los atacantes reforzaron las sospechas de que se trataba de los mismos sicarios.
El 2 de diciembre, mientras la policía continuaba recolectando pruebas, se produjo otro ataque, lo que subrayó la urgencia de la situación y la necesidad de una respuesta rápida y efectiva por parte de las autoridades. La captura de García Marín representa un paso importante en el desmantelamiento de la red criminal detrás de estos actos violentos