El Movistar Arena de Bogotá será el escenario de una de las noches más esperadas para los amantes de la salsa en Colombia, pues Willy García, con gran trayectoria en este género en el país, celebrará sus 30 años de trayectoria artística con un concierto que promete recorrer su carrera y revivir los éxitos que han marcado a varias generaciones.
Bajo el nombre Buenos Tiempos, el evento se llevará a cabo el 23 de noviembre de 2024, y contará con una alineación de invitados destacados, por lo que se espera que sea una velada inolvidable.
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Willy García llegará al Movistar Arena tras una gira que lo ha llevado a ciudades emblemáticas del país como Medellín, Cali, Buenaventura, Bogotá y Chocó, además de presentaciones en Ecuador, incluso, fue reconocido por la Alcaldía de Guayaquil y la Alcaldía de Cali por su contribución a la música y a la tradición sonora del Pacífico colombiano, gracias a su talento y perseverancia que le han permitido ganar un lugar preponderante en la escena salsera.
“Mucha gente me ha preguntado por este segundo concierto en Bogotá. Mantendremos la expectativa, estoy superemocionado y quiero decirles que va a ser espectacular. Las sorpresas que tenemos preparadas para todos los que asistan son únicas e inolvidables. Los espero en el Movistar Arena para que disfrutemos juntos”, aseguró García, que prometió una noche repleta de energía, nostalgia y ritmos contagiosos.
El evento comenzará a las 6:00 p. m. con la apertura de puertas, mientras que el espectáculo iniciará a las 8:30 p. m., cuando los sonidos de la conga, el timbal y el bongó den inicio a una fiesta que celebrará los éxitos de García a lo largo de tres décadas.
Junto al artista principal, figuras icónicas de la salsa como Michel “El Buenón”, Fito Foster “La Palabra”, el Conjunto Chaney, Los Hermanos Lebrón, Charlie Cardona, Javier Vásquez, Carlos Guerrero y Choco Orta acompañarán esta celebración, por lo que los interesados en asistir tendrán pueden adquirir sus entradas en el sitio web de tuboleta.com.
La historia detrás de “A Prueba de Fuego”
Parte fundamental de la carrera de García fue su paso por el Grupo Niche, una de las orquestas de salsa más importantes de Colombia y América Latina, en la que participó en la grabación del álbum A Prueba de Fuego en los años 90.
Durante esta época, el fundador del grupo, Jairo Varela, cumplía una condena en la cárcel de Villahermosa, ubicada en Cali, acusado de enriquecimiento ilícito, pero a pesar de estar tras las rejas, Varela continuó componiendo, por lo que Willy García recordó haber trabajado junto a él en varias canciones de aquel álbum emblemático, incluyendo la que da nombre al disco.
“Durante casi un año y medio, tuve que ir regularmente a la cárcel para trabajar en la composición con él. A pesar de su situación, Jairo seguía escribiendo incansablemente. A Prueba de Fuego fue una de esas canciones especiales para él; la grabamos bajo su dirección y yo tuve el privilegio de darle mi voz a ese tema que resonaba como una protesta y un reflejo de su fortaleza”, recordó García, que agregó que la conexión entre ambos fue fundamental para llevar adelante el proyecto, un testimonio del compromiso de Varela con su música a pesar de las circunstancias adversas.
García también explicó el proceso de grabación de otros temas como La Cárcel y Eres, que formaban parte de las composiciones de Varela durante su tiempo en prisión: “Nosotros, los cantantes del Grupo Niche, lo que hacíamos era prestarle la voz a Jairo Varela para que él pudiera expresarse a través de nosotros. Ver cómo cambiaba su semblante cuando recibía nuestras visitas fue algo realmente significativo”, menciona García.
Un proceso creativo entre prisión y estudio
Según explicó Willy García, el desarrollo de A Prueba de Fuego implicó un ir y venir constante entre la cárcel de Villahermosa y el estudio de grabación, pues con cada nueva visita, García y el productor José Aguirre presentaban las versiones preliminares de las canciones para la aprobación de Varela, que no dudaba en sugerir ajustes hasta lograr el sonido que tenía en mente: “Hubo días en los que pasábamos horas trabajando y regresábamos al estudio a hacer cambios para luego llevarlos nuevamente a la cárcel. Fue un proceso agotador, pero cuando Jairo aprobaba algo, sabíamos que valía la pena”, cuenta García.
Tras la liberación de Varela, el álbum fue regrabado bajo su supervisión directa, un paso que, según García, aportó una fuerza renovada a las canciones: “Trabajar con Jairo Varela fue una experiencia que me marcó profundamente. Él era un genio, y todo lo que sé de este arte tiene algo de su influencia. Haber formado parte del Grupo Niche es uno de los grandes orgullos de mi vida”, concluyó el artista.