En un esfuerzo por abordar la creciente amenaza del abuso infantil en línea, sobrevivientes y aliados han solicitado medidas urgentes para garantizar un futuro digital seguro para los niños. El evento satélite titulado ‘Futuros digitales seguros para los niños’, organizado por Safe Online, Brave Movement y WeProtect Global Alliance, se llevó a cabo en medio de la Conferencia Ministerial Mundial para poner fin a la violencia contra la niñez. Este encuentro tiene como objetivo generar impulso y solicitar a los gobiernos compromisos más sólidos para erradicar todas las formas de violencia infantil, incluida la violencia en línea.
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Los avances en tecnologías como la inteligencia artificial han aumentado los riesgos asociados con el abuso infantil en línea, lo que ha llevado a 36 millones de denuncias de contenido sospechoso solo en 2023. Estos datos destacan una “crisis de salud pública mundial” que afecta el bienestar físico y mental de los menores en todo el mundo. Según el Instituto Nacional de Salud (INS), solo en Colombia, alrededor de 30.575 niños sufrieron violencia sexual durante el mismo año.
La activista Rhiannon-Faye McDonald, sobreviviente de abuso sexual infantil asistido por tecnología, compartió su experiencia personal sobre el tema.
“Cuando tenía 13 años, un hombre mucho mayor, que pretendía ser otra persona, me acosó en línea. Ningún niño debería tener que experimentar lo que yo pasé. Hemos tenido treinta años para abordar esto y, sin embargo, la autorregulación de las empresas tecnológicas ha fracasado estrepitosamente a la hora de proteger a los niños”, afirmó McDonald.
El evento en Bogotá reunió a ministros y representantes gubernamentales de casi diez países, junto con funcionarios de las Naciones Unidas, académicos, líderes de la industria tecnológica, y grupos de sobrevivientes y jóvenes. Este diverso grupo discutió las crecientes amenazas en el ámbito digital y exploraron soluciones y acciones a nivel nacional para garantizar la seguridad de los niños en línea.
Marija Manojlovic, directora ejecutiva de Safe Online, resaltó la gravedad de la situación: “La creciente ola de violencia en línea contra los niños exige una acción urgente; durante demasiado tiempo hemos dejado que los menores naveguen solos por los peligros y riesgos existentes en el mundo digital”. Safe Online, el único fondo mundial dedicado a combatir la explotación y el abuso sexual infantil en línea, ha invertido cerca de $100 millones en más de 100 países, pero Manojlovic advierte que “esto es solo una gota en el océano”.
Los requerimientos hacia los gobiernos incluyeron acelerar la implementación de la Llamada a la Acción Informada por los Sobrevivientes, que aboga por una “legislación audaz y alineada a nivel mundial”, colocando el bienestar de los niños en primer plano. Esta iniciativa también enfatiza la necesidad de financiación sostenible para combatir la explotación en línea y exige a las plataformas digitales que adopten principios de seguridad desde su diseño.
Daniela Ligiero, fundadora de The Brave Movement, expresó: “Como sobrevivientes, sabemos que no hay distinción entre el abuso en línea y fuera de línea. Ambos destruyen vidas”. Ligiero señaló la urgencia de incluir a los sobrevivientes en el diálogo y la toma de decisiones enfocadas en mitigar los daños digitales.
Mientras tanto, Iain Drennan, director ejecutivo de WeProtect Global Alliance, lanzó un llamado a la acción unificada: “Cada segundo, un niño es sometido a explotación y abuso sexual en línea. Esto no es sólo una estadística; es una crisis global que exige una acción urgente y unificada. Queremos hacer un llamado a los líderes mundiales para que den un paso adelante ahora con un compromiso serio con acciones y medidas concretas”.
Finalmente, la línea de ayuda Te Protejo, operada por Red PaPaz, reportó el bloqueo de casi 700 sitios web en Colombia debido a la presencia de contenido de abuso y explotación sexual infantil durante 2023. Este dato ilustra el alcance del problema y la necesidad imperante de actuar con celeridad y decisión para proteger a los menores en el entorno digital.