En Cumbitara, Nariño, se vive una creciente preocupación por la seguridad de sus funcionarios tras el asesinato del personero municipal, un hecho que ha llevado a varios miembros de la administración local a presentar su renuncia debido a amenazas de grupos armados, de acuerdo con información obtenida por Noticias RCN.
La Federación Colombiana de Municipios, a través de su director Gilberto Toro, informó que “en el cuerpo del señor personero quedó claramente establecida una amenaza contra otros servidores públicos de ese municipio”.
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El ambiente de tensión y miedo se intensificó en las últimas horas, luego de que disidencias de las Farc llevaran a cabo un ataque en el que murió el personero de Cumbitara, Jimmy Alejandro Rosero.
Este funcionario había sido secuestrado y posteriormente encontrado sin vida en el sector de Puente Rojo, una zona rural del municipio. La situación ha obligado a la Federación de Municipios y a la alcaldesa de Cumbitara a pedir medidas urgentes de seguridad para garantizar la estabilidad en la región.
Las amenazas contra servidores públicos han desencadenado renuncias masivas en la Alcaldía de Cumbitara, especialmente entre los secretarios, quienes temen por su integridad.
“La mayoría de los secretarios de esa municipalidad decidieron renunciar”, confirmó Toro, enfatizando que la situación es crítica y requiere una respuesta inmediata. A su vez, señaló que la petición central es una intervención eficaz por parte del Gobierno Nacional y de la Fuerza Pública, para impedir que los grupos armados ilegales sigan afectando a la población y obstaculizando el desarrollo de la comunidad.
Luis Alfonso Escobar, gobernador de Nariño, expresó su rechazo ante este hecho violento y envió un mensaje contundente a los grupos armados ilegales: “Si no quieren hacer la paz, retírense”, haciendo un llamado a que abandonen el departamento si no están dispuestos a contribuir a la construcción de paz en la región.
Mientras tanto, el Ejército Nacional, desplegado en la zona afectada, logró recuperar el cuerpo del personero asesinado. Sin embargo, este trágico incidente sigue generando preocupación en Cumbitara y en otros municipios de Nariño, donde la presencia de grupos armados ha complicado el orden público y la vida de sus habitantes. La comunidad espera que el Gobierno Nacional y las fuerzas de seguridad tomen acciones contundentes para evitar que esta situación continúe escalando.
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La Federación Colombiana de Municipios solicitó una “presencia realmente efectiva de la Fuerza Pública” para proteger a los funcionarios y asegurar que la comunidad pueda retomar sus actividades sin temor a represalias o violencia.
Toro agregó que el constante asedio de estos grupos limita las oportunidades de progreso en Cumbitara, donde cada día se torna más difícil mantener el funcionamiento administrativo debido a la falta de garantías de seguridad.