Pequeñas empresas colombianas estarían en riesgo por cinco puntos ‘ocultos’ de la reforma laboral de Gustavo Petro

La Reforma Laboral, promovida por el Gobierno de Gustavo Petro, sigue su trámite en el Congreso de la República. Con su aprobación en la Cámara de Representantes, hay expectativa para lo que serán sus discusiones finales en el Senado de la República.

El proyecto ha generado fuertes controversias entre oficialistas y opositores; mientras que la bancada de gobierno señala que la iniciativa reivindica los derechos de los trabajadores del país, otros sectores consideran que la iniciativa impactaría en el aumento de costos para las empresas, así como la generación de empleo.

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En un informe publicado por la auditoria Crowe Colombia, se advierten cinco puntos ‘ocultos’ que contempla la reforma laboral que, según la organización, son ignorados por los congresistas y por el Gobierno nacional.

Estos aspectos tienen que ver con la regulación de los repartidores y domiciliarios de las plataformas digitales; los cambios en el recargo nocturno, modificaciones en los contratos de los aprendices del Sena, el aumento de las licencias de paternidad y la regulación de las empresas de servicios temporales.

“Partamos de que las cuentas indican que, de los 80 artículos que contenía este proyecto de ley, 15 ya tuvieron luz verde, 58 pasaron, pero con cambios, 7 se eliminaron y otros 7 fueron añadidos al texto inicial. Con todo esto decidido, análisis realizados por los gremios económicos y otras entidades, prevén que los costos laborales de las pequeñas y medianas empresas podrían incrementarse hasta un 34% a raíz de esta propuesta”, dijo Andrés Francisco Monroy, gerente de Servicios Legales y Tributarios de Crowe Colombia en diálogo con Portafolio.

El directivo resaltó que, en caso de que se aprueben aspectos como los recargos nocturnos y dominicales, así como la contratación de aprendices, las microempresas serán perjudicadas, ya que no tendrán la fuerza que tendrían las grandes empresas para solventar los lineamientos de la reforma, lo que implicaría en la desaparición de aproximadamente el 10 o 15 por ciento de las compañías en el territorio colombiano.

“Esto podría afectar la competitividad de las empresas y los mismos comerciantes lo han dicho en varias ocasiones: esta medida ocasionaría un incremento en los costos salariales hasta de $5 billones y eso, dicho de una forma simple, es dinero que no tienen las micro y pequeñas empresas, por lo que, o se quedan pequeñas o cierran porque no tienen cómo competir en el mercado”, destacó Monroy al citado medio de comunicación.

Así mismo, Monroy detalló: “según los expertos, con esto se proyecta que la reforma en general podría incrementar hasta un 5% el desempleo juvenil, teniendo en cuenta que las personas jóvenes son quienes por lo general trabajan en este tipo de turnos”.

De igual forma, el gerente de Crowe Colombia mencionó que, con la restricción de los contratos temporales, también generaría un impacto negativo en las pequeñas empresas del país, “por los incrementos que generarían las prestaciones sociales de los colaboradores que antes estaban contratados a través de terceros y también causaría aumentos significativos en la carga administrativa por cuenta de la gestión de más personal”.

Frente al aumento de las licencias remuneradas, contempladas en el proyecto del Gobierno Petro, el ejecutivo resaltó que estos aspectos podría generar un aumento del ausentismo laboral de los empleados, en un 10 por ciento.

“Otro costo se deriva de la protección a ciertos grupos, como los trabajadores en condición de discapacidad o a punto de pensionarse, porque se podría complicar la desvinculación de colaboradores en ciertas circunstancias. Aunque aparentemente es una buena noticia para los trabajadores, esto tendría un efecto boomerang, pues generaría que las empresas opten por no contratar personas con estas características, pues no sería rentable mantener empleados que podrían perder productividad en el tiempo”, concluyó al medio citado.

De acuerdo con un informe del Banco de la República, se estima que se perderían hasta 450.000 empleos, de llegar a aprobarse la reforma laboral, debido a los cambios en la jornada nocturna y el pago de horas extra. Por su parte, Fenalco detalla que el 31% de los empleadores estarían dispuestos a reducir su planta de personal o evitarían contratar más trabajadores, teniendo en cuenta los cambios propuestos por el Gobierno nacional.