Así funcionaba las empresas fachada de los hombres de Hezbolá en Colombia: investigan si enviaban cocaína a Oriente Medio

Mahdy Akil Helbawi, alias el Jefe o Jonathan, fue capturado en Cúcuta, Norte de Santander, en un operativo conjunto de la Fiscalía General de la Nación y la Dijín de la Policía Nacional, el 10 de agosto de 2024.

Este ciudadano colombo-libanés está acusado de financiar al grupo terrorista Hezbolá mediante el comercio ilegal de carbón vegetal, según informaron las autoridades colombianas.

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El 25 de octubre del citado año, la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, en rueda de prensa reveló la identidad del cabecilla de Hezbolá en Latinoamérica. Se trata de Hussein Ahmad Karaki, que sería jefe de operaciones, reclutamiento y planificación de acciones terroristas, siendo el más recordado el que sufrió la Embajada de Israel en Buenos Aires en 1992.

Sobre ese hecho, informaron que Karaki habría estado en la capital de Argentina horas previas al atentado y que se retiró del país con un pasaporte colombiano; por lo que la ministra del Gobierno Milei afirmó que es “el cerebro y reclutador de Hezbolá en América Latina” y que fue la persona que “compró y preparó la camioneta que explotó en la Embajada de Israel”.

Sobre el pasaporte del país cafetero, indicaron que en esa ocasión se presentó como Alberto León Nain y que también tuvo injerencia en varios atentados o planes terroristas en otros países de la región, incluyendo Colombia.

Bullrich afirmó que el cabecilla de Hezbolá hizo parte de un plan que tenía como objetivo principal asesinar a dos empresarios israelíes en Bogotá, pero mencionó que, por fortuna, las autoridades colombianas identificaron la situación e impidieron que se registrara el atentado, lo que “neutralizó este asesinato”.

Los dos capturados tienen nacionalidad colombiana, y sus empresas fachada, que, según El Tiempo, están ligadas a sus familiares en Venezuela. Además, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos indicó que las empresas están dedicadas al lavado de dinero, y que van desde Colombia al Líbano para supuestamente financiar a la milicia.

Según el citado medio, la empresa a nombre de Mahdy Akil Helbawi y Amer Mohamed Akil Rada es Zanga SAS, ingresó a la Lista Clinton en 2023. La compañía tenía sede en Barranquilla y exportaba carbón vegetal desde Colombia al Líbano, Kuwait, Emiratos Árabes Unidos e Israel.

Según el expediente judicial, desde 2015, Zanga SAS exportó más de 2.449 toneladas de carbón vegetal. Fuentes de la Policía Nacional le revelaron a El Tiempo que la investigación quiere determinar si las exportaciones estaban cargadas de cocaína.

Según la investigación, el encargado de recibir las exportaciones en el Líbano era Akil Rada, quien también está señalado por la justicia Argentina.

Una incautación de un cargamento ilegal de 28 toneladas de carbón despertó a las autoridades colombianas y estadounidenses para investigar a los señalados. Un tío de los capturados, aparece como dueño de BCI Technologies, con sede en el estado de Carabobo, Venezuela, según el citado medio. Además, Akil Rada y Ahmad Karaki cuentan con documentos venezolanos.

Informes de la DEA precisan que la ‘oficina de Asuntos Externos’ de Hezbolá, “ha establecido relaciones de negocios con los carteles de la droga suramericanos como la ‘Oficina de Envigado“.

Entre los buscados por este caso también se encuentra Samuel Salman el Reda, de 59 años, nacido en San Andrés, quien enfrenta cargos en Argentina y Estados Unidos.

“El acusado ayudó a Hezbolá a planificar y ejecutar el ataque del 18 de julio de 1994 contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (Amia)”, indicó la Corte Sur del Distrito de Nueva York.

Y agregaron: “Reclutar agentes en Tailandia, Panamá y Perú, entre otros lugares, para llevar a cabo vigilancia preoperacional en apoyo de planificación de ataques y ayudar a almacenar precursores explosivos”.

Interpol busca a Samuel Salman el Reda por “homicidio calificado agravado por haber sido cometido por odio racial o religioso”.

De acuerdo con la ministra argentina, después de Colombia, Hussein Ahmad Karaki estuvo en Bolivia para organizar un atentado similar al registrado en Buenos Aíres; sin embargo, las autoridades identificaron la presencia de un carrobomba a pocos metros de un edificio, lo que impidió que este explotara.

Karaki no estaría actualmente en el continente, sino que estaría radicado en Líbano; sin embargo, en los informes se conoció que en la región era conocido como Elías Ribeiro Da Luz, identidad con la que burlaba a las autoridades y podía trasladarse entre países sin problemas.