Desde el miércoles 30 de octubre hasta el 3 de noviembre, el equipo de rafting ‘Remando por la Paz’, formado por firmantes del Acuerdo de Paz de 2016 y habitantes de la comunidad de Miravalle en Caquetá, se encuentra en Pucón, Chile, representando a Colombia en el Campeonato Panamericano de Rafting 2024. Este equipo, que ha cambiado las armas por los remos, compite no solo por el honor deportivo, sino para transmitir un mensaje de paz y reconciliación al mundo.
Hermides Linares, exfarc y miembro líder del equipo, compartió su experiencia con Infobae Colombia y se refirió a la perspectiva sobre el proceso de paz que actualmente adelanta el Gobierno de Gustavo Petro con varios grupos armados, haciendo un fuerte llamado para que haya mayor acompañamiento y garantías en el proceso de reincorporación de los firmantes de paz.
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Un camino difícil hacia la reincorporación
En la entrevista, Linares recordó el proceso de transición que enfrentaron los firmantes de paz al dejar las armas y retornar a la vida civil. Con gran expectativa, pero también con incertidumbre, estos excombatientes buscaban una manera de reincorporarse sin tener una formación académica o profesional que les facilitara el acceso al empleo: “No éramos profesionales, la gran mayoría no éramos bachilleres. Para conseguir empleo en Colombia, un empleo digno, tiene que tener una carrera universitaria, tiene que tener formación para el trabajo, nosotros no la teníamos”, expresó, sobre las dificultades iniciales.
Sin embargo, esto no fue impedimento para salir adelante, Con la intención de aportar a la paz, buscaron desarrollar un proyecto productivo que también fuera amigable con el medio ambiente. Así nació ‘Remando por la Paz’, el club deportivo de rafting formalmente constituido desde julio de 2020, y liderado por personas en proceso de reincorporación y personas de las comunidades locales de la región del Pato en San Vicente del Caguán, Caquetá.
Cuenta con dos equipos masculinos y uno mixto y una escuela de formación con niños y niñas, como una opción de arraigo al territorio y prevención de las dinámicas de violencia; además de promover el turismo sostenible en la región.
El llamado al Gobierno Petro y al sector privado
A pesar de los logros y de la relevancia simbólica de su proyecto, el equipo de ‘Remando por la Paz’ ha enfrentado diversas dificultades, especialmente en cuanto al apoyo institucional. Hermides Linares reconoce que han recibido respaldo de algunas entidades como la Agencia para la Reincorporación y la Normalización (ARN) y el Viceministerio de Turismo; sin embargo, su percepción es que no cuentan con un acompañamiento integral que permita el desarrollo sostenible de su proyecto. “Falta, por ejemplo, la inclusión del Ministerio del Deporte para que apoye estos eventos, porque estamos representando a Colombia”, menciona Hermides, haciendo un llamado al Estado para que este tipo de iniciativas, que también promueven la paz, reciban respaldo financiero y logístico.
El equipo no cuenta con todos los implementos adecuados para entrenar y competir al más alto nivel. Esto representa un obstáculo importante, ya que en Colombia no disponen de botes de competencia ni de aguas rápidas: “Se requiere de muchos implementos y ya en estos momentos los que tenemos se están deteriorando”, expresó, destacando la necesidad urgente de contar con recursos para mejorar su preparación y reducir los riesgos que enfrentan en cada competencia.
Además, el desplazamiento reciente de los firmantes de paz y sus familias del antiguo Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (ETCR) de Miravalle a El Doncello ha sido otro desafío importante. Sin las condiciones básicas de servicios como energía y agua, y con un ambiente hostil marcado por amenazas de disidentes, su situación es precaria. “Llegamos y no hay energía que garantice la conexión de los electrodomésticos, por el agua también sufrimos”.
A pesar de lo difícil que ha sido para Linares y sus compañeros de ‘Remando por la Paz’ el adaptarse a la vida civil, ven el proceso de reincorporación no solo como una oportunidad personal, sino como un ejemplo inspirador para otros guerrilleros que aún no se han decidido por este camino: “Si en eso nosotros podemos aportar, estaríamos siempre en disposición de hacerlo con toda la experiencia que tenemos”, señaló, subrayando que para los firmantes en Caquetá, las expectativas de los diálogos que el actual gobierno adelanta con varios grupos armados ilegales son “esperanzadoras” y que confía en que el camino de la paz y la reincorporación puede ser transformador y beneficioso para aquellos que opten por dejar las armas.
Sin embargo, en el proceso de reincorporación a la vida civil y de emprendimiento de los firmantes de paz en Colombia, Linares también resalta que, aunque el gobierno debe garantizar la seguridad de los firmantes, existen otros actores, como el sector privado, que también juega un rol fundamental en la creación de condiciones de paz y reconciliación.
Un símbolo de transformación: de fusiles a remos
El Panamericano de Rafting 2024, que se desarrolla en el río Trancura, representa una oportunidad para el equipo de demostrar sus habilidades en medio de la naturaleza y dejar en alto el nombre de Colombia. Sin embargo, Hermides Linares destaca las dificultades que han enfrentado para adaptarse al ambiente y al clima del sur de Chile, un entorno distinto al cálido clima del Caquetá: “Nos afecta mucho, hay veces que amanecemos a tres grados, otras veces bajo cero; pero lo importante es que nos hemos ido aclimatando poco a poco, ya estamos listos para competir”, contó a Infobae Colombia, dejando claro que la resiliencia es una de las virtudes que han desarrollado.
Para Hermides Linares y los miembros de ‘Remando por la Paz’, el rafting “significa el cambio de los fusiles por los remos. Es un mensaje de paz, significa la transformación de nuestro territorio”. Si bien aspiran a estar entre los primeros lugares, su mayor propósito es dejar una buena imagen de Colombia y del Caquetá como un destino turístico y de esperanza de paz.
Este proyecto ha sido no solo un medio para la reincorporación de sus miembros, sino también una forma de vincular a las comunidades locales, crear arraigo y promover el respeto por el medio ambiente; es por eso que, en su esfuerzo por fortalecer y expandir su proyecto, el equipo mantiene una visión de futuro enfocada en la paz y el desarrollo social. “Queremos incluir a más jóvenes y fomentar el cuidado del medio ambiente y la protección de los ríos”, aseguró Linares, mostrando el compromiso de contribuir a la reconstrucción del tejido social en su comunidad.