Excombatientes de las Farc remarán por la paz: esta es la competencia en la que participarán en Chile

El municipio de El Doncello, en el departamento de Caquetá, es el escenario para que un grupo de excombatientes de las Farc se enfrente a un nuevo desafío: representar a Colombia en una competencia internacional de rafting en Chile.

Este equipo, conocido como Remando por la Paz, ha tenido que superar numerosos obstáculos, incluyendo el desplazamiento forzado de su antiguo lugar de residencia en el Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (Etcr) de Miravalle por amenazas de disidencias.

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A pesar de las dificultades, los cinco integrantes del equipo mantienen su compromiso con el proceso de paz y su pasión por el deporte. Según declaraciones de Hermides Linares, representante del equipo, el entrenamiento ha sido complicado debido a la falta de un río adecuado cerca de su nueva ubicación.

“Ha sido un poco difícil el entrenamiento, porque no tenemos un río adecuado para entrenar cerca de donde estamos”, explicó Linares en entrevista a Noticias Caracol, que también contó las limitaciones económicas que les impidieron trasladarse a otros lugares para practicar.

El equipo Remando por la Paz encontró en el rafting una forma de continuar su proceso de reincorporación a la vida civil, utilizando el deporte como una herramienta para promover la paz y la reconciliación. A pesar de las adversidades, su participación en eventos internacionales es un testimonio de su perseverancia y deseo de contribuir a una Colombia en paz.

El desplazamiento del antiguo Etcr de Miravalle no solo afectó a los miembros del equipo de rafting, sino también a varias familias que residían allí. Estas comunidades fueron reubicadas en El Doncello, donde han tenido que adaptarse a nuevas condiciones de vida mientras continúan con sus proyectos de reincorporación.

La historia de Remando por la Paz es un ejemplo de cómo los excombatientes de las Farc están buscando nuevas oportunidades y formas de integrarse a la sociedad, enfrentando retos significativos en el camino. Su participación en la competencia de rafting en Chile no solo representa un logro deportivo, sino también un símbolo de su compromiso con la paz y la reconciliación en Colombia.

Hace unos meses, los firmantes del acuerdo de paz del Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación (Etcr) Miravalle, en Caquetá, fueron trasladados debido a amenazas y ataques de disidencias de las Farc. Esta situación generó temor entre los residentes, que decidieron abandonar el lugar para proteger su seguridad. Sin embargo, este contexto no fue suficiente para detener a cinco excombatientes de las Farc, que ahora se preparan para representar a Colombia en una competencia de rafting en Chile.

El equipo está compuesto por tres mujeres y dos hombres, y se a preparado intensamente durante los últimos dos meses. Según Vanesa Marín, integrante del equipo, el grupo ha realizado entrenamientos físicos en el gimnasio, levantamiento de pesas y prácticas en el río, todo con el objetivo de participar en el campeonato sudamericano. “Estamos muy motivados por supuesto en este campeonato donde van a participar diferentes países de Suramérica”, afirmó Marín a Noticias Caracol.

Hermides Linares, otro de los miembros del equipo, destacó que a pesar de las dificultades, han logrado avanzar. “Nadie nos dijo que esto era fácil, pero le seguimos insistiendo”, comentó, resaltando que el deporte es una forma de demostrar su compromiso con el acuerdo de paz tanto al Caquetá como a Colombia.

El equipo de rafting espera no solo representar a su país en la competencia, sino también transmitir un mensaje de paz. A pesar de los desafíos que enfrentaron durante su preparación, su objetivo es dejar en alto el nombre de Colombia en el evento internacional.

En el corazón del territorio del Pato, en el Caquetá, un área históricamente marcada por la violencia, el proyecto Remando por la paz logró transformar su entorno a través del deporte y el turismo. Según declaraciones de Carlos Ariel García a La Silla Vacía, el simple hecho de establecer un proyecto turístico en una zona tan afectada por el conflicto ya representa un logro significativo. En los últimos siete años, niños y jóvenes han crecido con referentes distintos a la guerra, observando cómo los turistas llegan a su región y cómo las actividades en el río se convierten en parte de su vida cotidiana.

“Nuestro proyecto siempre ha estado caracterizado por remar contra la corriente, remar en la adversidad. Desde que comenzamos nunca ha sido fácil. Ese éxito tiene que ver con la gente del territorio del Pato. Es gente con demasiada resiliencia y empuje, que se ha tenido que sobreponer una y otra vez a estas condiciones. Esa característica es muy importante destacarla, porque es gente que a la que no le importa la adversidad. Siempre está con una actitud de ir hacia adelante, es nuestro factor humano diferencial”, dijo García.

El éxito de Remando por la paz se debe en gran medida a la resiliencia y determinación de la gente del Pato, quienes han aprendido a sobreponerse a las adversidades. García destaca que el proyecto siempre ha implicado remar contra la corriente, enfrentando desafíos constantes desde sus inicios. La actitud de avanzar sin importar las dificultades es lo que diferencia a las personas involucradas en este proyecto, convirtiéndose en su factor humano diferencial.

La iniciativa no solo ha cambiado la percepción de la comunidad local, sino que también ha abierto nuevas oportunidades económicas y sociales. La llegada de turistas y la participación en actividades deportivas han proporcionado a los habitantes del Pato una nueva perspectiva de desarrollo y convivencia pacífica. Este cambio de paradigma es visto como un resultado positivo del esfuerzo conjunto de la comunidad y los organizadores del proyecto.