Norma Nivia recordó su vida antes de la fama y cuánto ganaba trabajando de mesera: “Mesereaba todos los días”

La actriz relató los días en los que alternaba en sus estudios en la universidad con un trabajo en un puesto de comidas rápidas

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La actriz recordó sus primeros años en Bogotá durante una entrevista, y su primer trabajo antes de la actuación - crédito @normaniviag/Instagram
La actriz recordó sus primeros años en Bogotá durante una entrevista, y su primer trabajo antes de la actuación - crédito @normaniviag/Instagram

Norma Nivia es una actriz y presentadora colombiana, conocida por su participación en cine, televisión y teatro. Nació en Líbano, municipio del departamento del Tolima, y en una carrera que se extiende por 25 años.

Destacó en el entretenimiento colombiano como modelo, pero todavía más por sus papeles en producciones como Nuevo rico, nuevo pobre, La bella Ceci y el imprudente, Secretos de familia, La traicionera, Mentiras perfectas, y más recientemente Klass 95.

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Aunque a lo largo de los años se le reconoció su versatilidad, los papeles en los que más recordación alcanzó fueron los de villana, siendo una habitual en producciones nacionales durante toda su carrera. La actriz fue el eje de una sección de La Red, de Caracol Televisión, en la que Boyacomán entrevista a figuras de la farándula nacional para conocer sus orígenes y la forma en que vivían antes de alcanzar la fama.

Uno de los primeros temas de conversación llegó producto de la altura de la tolimense, que contrastaba fuertemente con la estatura más baja del comediante, lo que llevó a este a preguntarle si tuvo novios más bajos que ella. Al respecto, Norma respondió “De pronto cuando estaba en mi pueblo, alguno si tuve. Tocaba, no había mucho de donde escoger”, reconoció entre risas.

La actriz contó cómo fueron sus primeros años en Bogotá, viviendo en Suba - crédito @normaniviag/Instagram
La actriz contó cómo fueron sus primeros años en Bogotá, viviendo en Suba - crédito @normaniviag/Instagram

Acto seguido recordó sus orígenes y contó que cuando se fue de su pueblo a buscar suerte en Bogotá “Me puse a estudiar lo que mi papá me dijera. El hombre me dijo bacteriología y yo dije ‘hágale, bacteriología’”, recordó. También contó que el primer apartamento que tuvieron en la capital del país estaba en Suba, justo al lado del centro comercial Centro Suba.

La actriz reconoció que era muy consentida, al punto que no aprendió a cocinar a una edad temprana. “Debo aceptar que mi mamá... ella cocina delicioso y quiso enseñarnos, pero ninguna sacó esa virtud”, contó, recordando que era habitual que su madre le dejare carne adobada que solo debía cocinar. “¡Más inútil! A mi casi que me lo hacían todo en la cocina, y obviamente yo vivía a punta de sandwiches y pasta”, admitió. Eso sí, Norma dijo que su mamá si les inculcó el aseo y a preparar su uniforme del colegio.

Luego la conversación se trasladó a un restaurante, para abordar la época en la que Norma trabajó medio tiempo durante varios años. Tras protagonizar un sketch corto en el que la actriz volvía a ser mesera y Boyacomán interpretaba a los clientes con los que lidió en su día, Norma contó cómo terminó trabajando en ese oficio para alternar con sus estudios de bacteriología.

La actriz contó que durante su etapa como mesera hubo una ocasión en la que le robaron todo el sueldo - crédito @normaniviag/Instagram
La actriz contó que durante su etapa como mesera hubo una ocasión en la que le robaron todo el sueldo - crédito @normaniviag/Instagram

“Empecé a estudiar y vi quién trabajaba de mis compañeras, y encontré una que trabajaba de mesera en un restaurante. Le dije ‘presénteme al gerente’”, recordó, valiéndose de su estatura para aparentar ser mayor de edad. “Mesereaba todos los días. Llegaba a mediodía y acababa a las 11 de la noche”, contó.

Cuando Boyacomán le preguntó cuánto le pagaban por el trabajo, la actriz recordó que eran “500 pesos la hora” (unos 3.500 pesos al cambio actual), a lo que se sumaban las propinas. No obstante, reconoció que el dinero que sacaba de estas no era el mejor, debido a que estas se ponían en un tarro en común para todos los empleados.

La actriz también recordó que cometió un error de juventud. “Seguí trabajando en vacaciones, pero cometí un grave error. Me pagaron mi sueldo y me fui de fiesta a La Candelaria, a una casa toda hippie. Me pusé a tomar y me prendí, me quedé dormida. No me paso nada a mí, pero me levanté y no tenía ni un peso. Me robaron todo el sueldo”, dijo.

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