Falabella anuncia el retiro de artículo tras detectar riesgos de quemaduras: conozca cuál es el producto y cómo hacer la devolución

Las bolsas de agua caliente son un recurso ampliamente utilizado en hogares y consultorios médicos por su versatilidad para aliviar dolores musculares y calambres, así como para proporcionar calor en ambientes fríos.

Sin embargo, Falabella Colombia emitió el 24 de octubre un comunicado advirtiendo sobre un posible riesgo asociado a uno de sus productos, la bolsa de agua trenzas morada Mica, adquirida en 2017.

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Según la empresa, este artículo podría causar quemaduras a los usuarios, lo que ha llevado a la implementación de una medida preventiva para su devolución. La compañía ha decidido permitir que los clientes devuelvan el producto en cualquiera de sus tiendas para obtener un reembolso completo.

Esta acción, según Falabella, refleja su compromiso continuo con la seguridad de sus clientes, a pesar de que han pasado varios años desde la compra del producto. El procedimiento de devolución es gratuito y puede realizarse en cualquiera de las 26 tiendas que Falabella tiene en 11 ciudades de Colombia, incluyendo Bogotá, Medellín, Cali y Barranquilla.

Las bolsas de agua caliente son recomendadas por especialistas en salud para tratar dolores musculares, calambres y rigidez articular, ya que el calor proporciona un efecto relajante y mejora la circulación sanguínea.

Además, al ser enfriadas, estas bolsas se convierten en compresas frías que ayudan a reducir la inflamación y el dolor en lesiones deportivas, convirtiéndolas en una herramienta clave para la recuperación.

Las bolsas de agua también son utilizadas en el cuidado de bebés, ya que pueden calentar cunas y camas, creando un ambiente acogedor y confortable. Aunque menos común, también se utilizan para transportar agua y mantenerse hidratado, especialmente en actividades al aire libre.

Falabella también anunció el 10 de octubre la reactivación de una campaña de seguridad para un producto de la marca Benefit Cosmetics. El retiro preventivo involucra al Gimme Brow Gel Voluminizador para Cejas, utilizado desde 2017.

La medida se toma tras la orden de la Superintendencia de Industria y Comercio, que emitió una alerta debido a reportes de posible “irritación ocular” en algunos consumidores. Los productos afectados pertenecen a varias referencias, que incluyen SKU como Gimme Brow 03 Medium Mini y Gimme Brow 01 Light Metalizado Mini, entre otras.

Falabella ha instado a sus clientes a suspender inmediatamente el uso de dichos productos y proceder con la solicitud de reembolso. El proceso es gratuito y no requiere comprobante de compra. La compañía ha expresado sus disculpas por las molestias ocasionadas, aunque asegura que este incidente no compromete la calidad ni la confiabilidad de otros productos que comercializa.

Para facilitar el proceso de devolución, Falabella ha dispuesto una línea de atención al cliente, el número +57 6015878002, y ha indicado que los clientes pueden acudir a cualquier tienda de la cadena en Colombia con el producto, sin necesidad de presentar el comprobante de pago.

En este contexto, es fundamental considerar que la legislación vigente establece un marco de protección para los consumidores, asegurando sus derechos y obligaciones en las relaciones con productores y proveedores, según el Decreto 252 de octubre de 2022.

Así, las normas se aplican a todos los sectores económicos sin regulación especial, abarcando tanto productos nacionales como importados. Uno de los objetivos principales de esta ley es garantizar la seguridad de los consumidores frente a riesgos para su salud y bienestar, promoviendo el acceso a información clara y precisa que les permita tomar decisiones fundamentadas.

Por lo tanto, los derechos específicos de los consumidores incluyen el derecho a recibir productos de calidad, a la seguridad e indemnidad, y a obtener información veraz y completa sobre los productos y sus posibles riesgos. El decreto también contempla la protección contra la publicidad engañosa y el derecho a reclamar ante los productores o proveedores por daños sufridos.

Finalmente, es importante destacar que los consumidores tienen el deber de informarse sobre la calidad de los productos y seguir las instrucciones de uso proporcionadas por los productores.