Bancos en Colombia ya empezaron a eliminar el pago de este impuesto que se cobra por cada transferencia digital

En un avance muy importante hacia la inclusión financiera, Colombia ya empezó a ver cómo la mayoría de sus entidades financieras decidieron eliminar los costos por transferencias inmediatas entre diferentes cuentas bancarias, en un esfuerzo por modernizar el sistema financiero y facilitar la bancarización.

Dicho desarrollo busca derribar desde ya las barreras que hasta hace poco obstaculizaban la adopción generalizada de los métodos de pago digitales. Servicios como Transfiya tienen un papel protagónico en esta transformación al permitir a los usuarios hacer transferencias sin costo alguno, con un tope diario de $3.000.000.

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La gratuidad de estos servicios es vista como un impulso notable hacia un ecosistema financiero más accesible y eficiente. La eliminación de los costos transaccionales para las transferencias tiene el potencial de disminuir la dependencia del efectivo, un modo de pago predominante en varias regiones del país. Esta transformación no solo mejora la experiencia del usuario, sino que también puede fomentar la formalización económica y una mayor conectividad financiera entre los colombianos.

El vicepresidente de Planeación y Negocio en ACH Colombia, Erwin Schaefer, destacó que “con la eliminación paulatina de costos en las transferencias inmediatas, estamos democratizando el acceso a servicios financieros, permitiendo que más colombianos se conecten y participen en la economía digital”.

Dicho enfoque representa un avance clave hacia un sistema financiero más inclusivo y equitativo. La adopción de tecnologías de transferencia inmediata, como Transfiya, también facilita la transición hacia una economía en la que los pagos digitales son la norma, lo que reduce así el uso del efectivo.

Sin embargo, se advierte que, aunque la mayoría de las entidades bancarias no cobran por estas transferencias, es recomendable que los usuarios revisen los términos y condiciones de cada institución, ya que pueden existir excepciones o estipulaciones específicas que afectan la experiencia del usuario. En este contexto, la transparencia de las condiciones es vital para garantizar que todos los usuarios puedan beneficiarse por igual de estos avances tecnológicos.

El creciente uso de herramientas digitales para agilizar transacciones entre cuentas bancarias diferentes se traduce en un notable avance hacia la formalización económica en Colombia. Al respecto, se destaca que estas iniciativas no solo aumentan la eficiencia, sino que promueven una mayor participación en el ecosistema financiero del país, transformando la manera en que los manejan y transfieren su dinero colombiano diariamente.

La información se confirma en medio de la adaptación de Bre-B, el nuevo sistema que promete transformar el panorama de pagos en Colombia y que permitirá hacer transferencias gratuitas entre bancos durante los próximos tres años.

La directora del Departamento de Sistemas de Pagos del Banco de la República, Ana María Prieto, informó sobre los avances en el desarrollo de dicho sistema. Durante su intervención en el Foro Sistema de Pagos Inmediatos, explicó que Bre-B, como es conocido el nuevo sistema, se encuentra en la fase tres de cinco, lo que confirma su operación para septiembre de 2025.

Esta es una de las iniciativas del banco que busca modernizar y generar eficiencia en los pagos de bajo valor en el país.

El sistema de cobros para las transacciones fue diseñado para comenzar con una tarifa promocional de $0 durante sus primeros tres años de funcionamiento, confirmó la funcionaria. Enfatizó en que una vez superado este período inicial, “el cobro será de $3,23 aplicable a cada punta, resultando en un total de $6,46 por transacción a los sistemas de pagos de bajo valor”. Esta estrategia tarifaria busca incentivar el uso del sistema mientras se establece en el mercado.

El gerente general del Banco de la República, Leonardo Villar, en la misma línea de Prieto, anotó que espera que el esfuerzo del Emisor brinde las condiciones necesarias para que el ecosistema mejore en precios, cobertura, calidad y variedad en la oferta de servicios de pago.

“Es deseable que el mercado converja a una tarifa $0 en las transferencias entre personas, al tiempo que siga fortaleciendo su propuesta de valor en los pagos a negocios, a partir de modelos de adquirencia competitivos con elementos de valor agregado al comercio”, precisó.