Por vencimiento de términos, un juez le concedió la libertad a Uldarico Vargas, un hombre de 56 años que el pasado 1 de febrero atacó con un machete a su esposa Blanca Inés Contreras, en un acto de violencia de género en el Guamo, departamento del Tolima.
Blanca sufrió 22 heridas en diferentes partes de su cuerpo luego de llegar a su vivienda en motocicleta tras dejar a su hijo en el colegio. Desde ese día, el agresor había permanecido detenido en una cárcel, pero el pasado 18 de octubre, su abogado solicitó su libertad, apelando al vencimiento de términos en el proceso en su contra.
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La Secretaría de la Mujer del Tolima fue notificada por el sistema de alertas tempranas de la Secretaría Distrital de la Mujer de Bogotá sobre el caso de riesgo extremo de feminicidio en el municipio de El Guamo, Tolima. Una vez recibida la notificación, se direccionó a las entidades competentes.
La entidad solicitó la presencia de un fiscal en la audiencia para asegurar que no se concediera la libertad al agresor, según la información disponible. A pesar de haber emitido alertas y realizado las gestiones necesarias para que se asignara un fiscal en la audiencia, cuyo objetivo principal era evitar que el procesado obtuviera la libertad, el juez no respaldó la medida. Esta decisión ha generado insatisfacción entre quienes esperaban un resultado diferente.
Cientos de reacciones de rechazo e indignación surgieron tras conocerse la noticia. Una de las más destacadas fue la de Adriana Magali Matiz, gobernadora del Tolima, quien expresó su opinión a través de redes sociales.
“Como mujer, madre, gobernadora y defensora de los derechos, la vida y la integridad de las mujeres, expreso mi total indignación y rechazo a que Uldarico Meléndez, quien brutalmente atacó con 22 machetazos en el cráneo y las manos a Blanca Inés Contreras, haya quedado en libertad”, se puede leer en su cuenta oficial de X.
En conversación Caracol Radio la mujer expresó total rechazo ante esa medida afirmando que teme realmente por su vida: “Tengo miedo. Ahora debo cambiar de residencia y huir del municipio porque es posible que tome represalias. Me indigna que tantas campañas que hablan de la protección de la mujer, que denunciemos que no nos quedemos calladas y qué pasa? Nada. Hoy estoy en riesgo nuevamente”, dijo.
Además, se dirigió a la justicia señalando a la Fiscalía por incumplimiento en el debido proceso al no haber presentado los recursos correspondientes permitiendo que se llegara a esta instancia en la que la otra parte podía acogerse al vencimiento de término.
Luz Nelly Arbeláez, secretaría de la mujer confirmó que trataron de intervenir para que este caso no fuera uno más de los que se desdibujan en manos de la justicia: tratamos de abogar como Secretaría de la Mujer Departamental, para ser escuchadas y tener presente el riesgo inminente de esta vida que está en peligro al salir este hombre en libertad. Hoy hacemos entrega como una medida de protección de este dispositivo que está conectado con la Policía Nacional, con la Secretaría de la Mujer y con un familiar; una vez activado, los contactos vinculados recibirán una alerta”.
Esta situación presentaba antecedentes, pues el pasado mes de noviembre, la pareja había tenido un altercado luego de que el victimario llegó a su vivienda en estado de alicoramiento e intentó agredir.
El Sistema Nacional de Vigilancia en Salud Pública (Sivigila) del Instituto Nacional de Salud (INS) ha reportado un preocupante aumento en los casos de violencia de género en Colombia. Hasta el 8 de junio de 2024, se han registrado 66.621 incidentes de este tipo en el país, lo que refleja una situación alarmante en términos de seguridad y derechos humanos.
De acuerdo con los datos proporcionados por el INS, un 75,6% de los casos de violencia de género, es decir, 50.374 incidentes, afectaron a mujeres, mientras que el 24,4%, equivalente a 16.247 casos, involucraron a hombres. Esta distribución evidencia una mayor vulnerabilidad de las mujeres frente a este tipo de violencia, aunque también subraya que los hombres no están exentos de ser víctimas.