Denuncian presunto caso de abandono animal: una perrita vive rodeada de heces en una terraza

En Bogotá, un caso de presunto maltrato animal ha generado gran conmoción en la comunidad de la localidad de Kennedy. Un video difundido en redes sociales muestra a una perrita criolla viviendo en condiciones deplorables en la terraza de una vivienda ubicada en la carrera 69F #7-14.

La perrita, rodeada de sus propias heces, ha sido vista constantemente en el mismo lugar, expuesta a las inclemencias del clima sin acceso a un refugio adecuado ni a condiciones básicas de higiene. Esta situación ha provocado un llamado urgente a las autoridades competentes, como la Policía Nacional y el Instituto de Protección Animal de Bogotá, con el fin de que intervengan de inmediato y rescaten al animal.

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Asimismo, los ciudadanos que han sido testigos de su estado expresaron su preocupación y solicitaron la máxima difusión del caso para asegurar que la mascota reciba la atención necesaria. Es preciso recordar que el abandono de animales de compañía es considerado una infracción grave según la normativa vigente en Colombia, que protege los derechos de los seres sintientes.

Los dueños de la canina podrían enfrentar sanciones que incluyen multas y la posible pérdida del derecho a tener mascotas. Hasta el momento, las autoridades no han emitido un pronunciamiento oficial, pero se espera que actúen prontamente debido a la amplia difusión del video.

Tras la amplia difusión del clip en diferentes plataformas sociales, lo internautas no dudaron en expresar su repudio e indignación ante este presunto caso de maltrato animal: “Por favor ayúdenla!”; “Tiene carita de sufrimiento”; “Hps, para que tienen animalitos así?”; “Pobre perrita, por favor hagan algo”; “Personas así no deberían dejarlos tener mascotas”, son algunos comentarios que se leen.

Este tipo de situaciones suele ser atendido por las autoridades, quienes tienen la facultad de intervenir en casos de maltrato animal y proceder con el rescate de los animales en riesgo. La comunidad espera que las imágenes difundidas contribuyan a una rápida acción por parte de las entidades responsables para garantizar el bienestar de la perrita.

Una denuncia ciudadana llevó a las autoridades a descubrir un caso alarmante de maltrato animal en la capital del país. Durante un operativo realizado en la localidad de Kennedy, al sur de la ciudad, se encontraron 41 perros en condiciones deplorables dentro de una vivienda. De acuerdo con la información proporcionada, el lugar funcionaba como un criadero ilegal donde los animales eran mantenidos en condiciones insalubres y de hacinamiento.

El operativo fue llevado a cabo por miembros del Instituto Distrital de Protección y Bienestar Animal (Idpyba) en colaboración con un grupo de Carabineros de la Policía Nacional. Al ingresar a la vivienda, los funcionarios hallaron a los perros, de diversas razas, distribuidos en diferentes espacios de la casa. Muchos de ellos presentaban signos evidentes de desnutrición y maltrato, y algunos incluso fueron encontrados dentro de los muebles de la cocina.

Un veterinario del Instituto de Protección Animal evaluó a los caninos y emitió un informe desfavorable sobre su estado de salud. Tras el rescate, los perros fueron trasladados a un centro especializado donde recibirán atención veterinaria adecuada para mejorar su condición.

Las autoridades hicieron un llamado a la ciudadanía para que denuncie cualquier caso de maltrato animal, enfatizando la importancia de actuar de manera inmediata para proteger la vida de los animales. Este caso resalta la necesidad de una vigilancia constante y la colaboración de la comunidad para prevenir situaciones similares en el futuro.

En Colombia, las autoridades tienen la capacidad de decomisar animales en riesgo y tomar medidas para asegurar su protección, según la legislación vigente. Esta normativa se enmarca en la Ley 1774 de 2016, que reconoce a los animales como seres sintientes y establece sanciones para quienes los maltraten o abandonen. La ley, que modifica el Código Penal, contempla penas de prisión de 12 a 36 meses y multas económicas para quienes cometan actos que comprometan el bienestar o la integridad de los animales.