Colombiano es acusado de ser “reclutador paramilitar” en Venezuela: su familia teme por su vida y exige intervención diplomática inmediata

El 17 de octubre, el ministro de Interior y Justicia de Venezuela, Diosdado Cabello, reveló la detención de un grupo de ciudadanos extranjeros, acusados de ser supuestos mercenarios y vinculados a acciones desestabilizadoras contra la dictadura de Nicolás Maduro.

Entre los detenidos se encuentra Manuel Alejandro Tique Chaves, un ingeniero industrial colombiano, señalado por el ministro de ser un “reclutador de paramilitares”. Sin embargo, la familia de Tique se ha pronunciado desmintiendo las acusaciones y manifestando gran preocupación por el paradero y la seguridad del joven.

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Víctor Manuel Tique, padre del ingeniero detenido, ofreció declaraciones en W Radio y expresó su angustia y preocupación por la falta de información respecto a su hijo, quien fue arrestado en la frontera entre Colombia y Venezuela el pasado 14 de septiembre, cuando se dirigía a una capacitación laboral en la ciudad venezolana de Guasdualito, como parte de su trabajo con la ONG Consejo Danés para Refugiados (DRC).

“Mi hijo trabaja con una ONG, con el Consejo Danés para Refugiados, el 14 de septiembre debía ir a Venezuela para conocer al equipo de trabajo en la oficina en Guasdualito, y en la frontera, al presentar el pasaporte, fue detenido por la Dirección General de Contrainteligencia Militar de Venezuela”, explicó Víctor Manuel Tique.

El padre del joven colombiano ha hecho múltiples gestiones para conocer el paradero de su hijo, contactando a autoridades colombianas, como el embajador de Colombia en Venezuela y el consulado, quienes, según él, han enviado requerimientos oficiales al Gobierno venezolano. Sin embargo, las respuestas han sido nulas, hasta que Diosdado Cabello mencionó públicamente a su hijo.

“Solo hasta el 17 de octubre que Diosdado Cabello dijo que mi hijo se escuda en una ONG para ser un reclutador paramilitar”, lamentó Víctor Tique. El padre, claramente afectado, sostuvo que su hijo no es un criminal y que se dedica únicamente a labores humanitarias. “Mi hijo es ingeniero industrial enfocado en temas medioambientales, y se vinculó con la ONG para trabajar de forma humanitaria. Esta organización asiste a los venezolanos en Colombia con algo de dinero, alimento, ese tipo de cosas”, detalló.

La incertidumbre sobre el paradero de Manuel Alejandro Tique ha generado preocupación en su familia, que teme por su seguridad dentro de un sistema judicial como el venezolano, que consideran opaco y represivo, especialmente en casos que involucran a extranjeros. “La verdad es que el solo hecho de que sea la Dirección General de Contrainteligencia Militar, pues yo pienso que mi hijo está en riesgo en ese país”, afirmó Víctor Tique. “En Venezuela es muy difícil y menos siendo un extranjero no tiene un alcance para llegar allá”, añadió, subrayando el temor por lo que pueda estar ocurriendo con su hijo en custodia de las autoridades venezolanas.

Por su parte, Diana Marcela Tique, hermana de Manuel Alejandro, también se ha mostrado preocupada ante la falta de respuestas. En entrevista a El Espectador, señaló que la última vez que tuvo contacto con su hermano fue a las 2 de la tarde del 14 de septiembre, cuando él estaba a punto de cruzar el puente internacional hacia Venezuela. Desde ese momento, la familia no ha tenido más información.

“Lo que quiero es que no se mencione mal el nombre de mi hermano y su profesión. Que se esclarezca la situación”, pidió Diana Marcela Tique, que lleva más de un mes sin saber nada sobre su hermano. La familia ha acudido a diversas instancias, entre ellas embajadas y consulados, para obtener información, pero no han recibido respuestas satisfactorias.

El Consejo Danés para Refugiados (DRC), organización para la cual trabaja Manuel Alejandro Tique, también emitió un comunicado en el que confirmaron que Tique es empleado de la ONG y que, al momento de su detención, se encontraba realizando una misión laboral en Venezuela. “La seguridad y el bienestar de los miembros de nuestro equipo, tanto física como mentalmente, siguen siendo la máxima prioridad de DRC”, indicó la organización, que además reiteró su compromiso con la neutralidad y la imparcialidad en su labor humanitaria.

A pesar de las acusaciones de la dictadura venezolana, la familia de Manuel Alejandro insiste en que él es inocente y que su única intención al viajar a Venezuela era cumplir con sus responsabilidades laborales. “Él nunca tuvo miedo de ir a Venezuela porque iba con su empresa. Pero ahora estamos en una situación totalmente compleja, fue algo muy riesgoso y ojalá hubiéramos podido detenerlo antes del viaje”, declaró Diana Marcela Tique a la revista Semana.

El caso de Manuel Alejandro Tique ha generado gran incertidumbre, y su familia sigue esperando una respuesta concreta sobre su situación. “Pedimos la intervención de los ministerios y del presidente porque le vulneraron los derechos, está privado de la libertad en otro país y eso le pudo pasar a cualquier colombiano”, enfatizó su amiga Nataly Díaz, que ha utilizado las redes sociales para alertar sobre la desaparición del ingeniero.

En la misma línea de Díaz, la representante a la Cámara Jennifer Pedraza pidió a la Cancillería de Colombia que intervenga de inmediato para proteger la vida del joven colombiano detenido en Venezuela. Durante una intervención pública, Pedraza insistió en la necesidad de que las autoridades colombianas actúen con mayor rapidez y compromiso para salvaguardar la vida de Tique. “Queremos pedirle a la Cancillería que por favor nos apoye en estas gestiones”.

“Que el país se entere de que tenemos hoy a un colombiano retenido en Venezuela y que no ha habido poder humano que logre que las organizaciones de derechos humanos incluso puedan responder por el estado de Manuel Alejandro y tampoco hemos tenido ninguna noticia de él desde hace más de un mes”, agregó.