Una emergencia fue reportada la noche del sábado 19 de octubre en la vía que conecta los municipios de Zipaquirá y Pacho, en el centro del departamento de Cundinamarca, tras el desbordamiento de la quebrada Venta Larga.
Este incidente, causado por las intensas lluvias que han azotado la región, generó una avenida torrencial que arrastró varios vehículos en el sector afectado.
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De acuerdo con información oficial, la quebrada se desbordó por las fuertes precipitaciones, lo que provocó una avenida de agua que impactó a los conductores que transitaban por la zona.
La emergencia de Cundinamarca dejó a cuatro personas lesionadas, quienes fueron atendidas de inmediato por los Bomberos Voluntarios del municipio. Las víctimas, que sufrieron heridas leves, fueron trasladadas al Hospital Regional donde los médicos confirmaron que se encontraban fuera de peligro.
Los afectados, dos adultos y dos menores se identificaron como: Marisol Silva Quintero, de 25 años; Alder José Durán Silva, de 5 años; Luz Ángela Prieto, de 40 años; y David Santiago Suesca Prieto, de 14 años.
La comandante del cuerpo de bomberos, Lizeth Sánchez, destacó que la pronta intervención del equipo evitó mayores consecuencias. A pesar de que el tramo ha sido parcialmente despejado, gracias al trabajo conjunto entre Empresas Públicas de Zipaquirá (EPZ) y la Secretaría de Obras Públicas, la rehabilitación completa de la carretera tomará aún más tiempo.
En cuanto al alcalde de Zipaquirá, Fabián Mauricio Rojas García, contó que las personas afectadas lograron continuar su camino hacia Zipaquirá. “Se logró despejar una parte del tramo, pero seguimos trabajando en otro sector de la misma recta en Ventalarga”, informó para el medio local Extrategia Medios.
Además, el mandatario local dio un nuevo informe a las 5:34 de la mañana: “agradezco a los organismos de socorro y al Instituto de Concesiones de Cundinamarca (ICCU) estar muy atentos a estas situaciones, seguimos aquí. Quiero mostrarles de la escuela de Ventalarga cómo quedó en las raíces de los árboles, piedras muy grandes, de vehículos contra las mallas, otro que quedó en la parte de abajo y cómo queda la recta de este sector, vía entre Pacho y Zipaquirá”.
El alcalde Mauricio Rojas habló también sobre de las afectaciones en la vía, pues algunos barrios de Zipaquirá enfrentarán cortes en el suministro de agua potable debido a la rotura de tuberías. Las autoridades municipales continúan trabajando para reparar las tuberías y restablecer lo más pronto.
La vía que conecta Zipaquirá con Pacho, específicamente en el sector de Ventalarga, continúa con problemas graves de movilidad luego de los deslizamientos que afectaron la zona.
La situación se encuentra bajo monitoreo constante, y aunque la situación parece estar controlada, las autoridades no descartan nuevas intervenciones preventivas.
El cuerpo de bomberos continúa realizando labores de monitoreo y evaluación en la vereda Ventalarga, área rural de Zipaquirá, donde se produjo el desbordamiento. La emergencia ha generado gran preocupación entre los habitantes de la región, lo que ha llevado a las autoridades a trabajar de manera ininterrumpida para mitigar los riesgos y evitar posibles nuevos desbordamientos.
El subcomandante del cuerpo de bomberos ha pedido a la comunidad mantenerse alerta y seguir estrictamente las recomendaciones de las autoridades, con el fin de evitar daños mayores. Además, ha instado a los residentes a reportar cualquier anomalía en los niveles de agua o en las estructuras de sus viviendas para que las autoridades puedan actuar de manera oportuna.
El cuerpo de bomberos solicitó a la comunidad mantenerse alerta y seguir las recomendaciones de las autoridades para evitar mayores daños. “Nuestra prioridad es salvaguardar a las personas y sus bienes”, indicó el integrante de Bomberos.