Colombia se ha distinguido por ser una tierra de reinas, donde muchas se han logrado destacar en el extranjero gracias a su belleza, talento y, en especial, a los vestidos que lucen que las hace ver deslumbrantes.
Por este último motivo también han brillado los diseñadores colombianos que las visten, debido a que los creativos y despampanantes diseños son un factor importante al momento de ser escogidas como soberanas de la belleza ante el mundo.
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Uno de esos diseñadores destacados es John Lecksell, que ha tenido el privilegio de vestir a reinas como Camila Avella, miss Universe Colombia 2023, María Fernanda Aristizabal, miss Universe 2022, hasta la exmiss Universe Paraguay, Nadia Ferreira, actual pareja de Marc Anthony. No obstante, se encuentra en el centro de la polémica debido a que algunas de sus clientas acusan al samario de incumplir con varias condiciones de diseño y entrega de sus espectaculares vestidos.
La denuncia fue conocida por el programa de Caracol Televisión La Red, donde algunas de las presuntas afectadas contaron sus experiencias con el aclamado diseñador. Una de ellas es Rosa María Rois, hermana del fallecido acordeonero Juancho Rois, que indicó que visitó el taller del diseñador en diciembre de 2023, aprovechando una promoción que tenía en su boutique si pagaba el costo total de la prenda que quería.
“(...) Entonces dije como que ‘wow’, o sea, súper bien, de una, paguemos y mi mamá le dijo cómo mira, esto es como lo que yo tengo en mente, etcétera y dijo que hay unas telas súper bonitas que se pueden pedir por Tailandia, por no sé qué, pues por allá en el exterior y estarían llegando a partir de febrero y marzo”, expresó Rois.
Tal fue el entusiasmo de la clienta con el talento y amabilidad del diseñador, que decidieron que él sería quien confeccionara el vestido de su madre. Sin embargo, con el paso de los días y los meses, las mujeres comenzaron a experimentar situaciones extrañas con el avance del diseño del vestido, pues las telas prometidas nunca las vieron.
“(...) para la segunda prueba llegamos me tenían un tutú y ya para la tercera cita yo decía como okay, que tienen, me están midiendo el mismo un tutú y yo ya vi esto. Entonces dijo que no, que es que hay que ver no sé qué. Ya después que volvía a subir y me dieron como un corset que iba a hacer la parte de arriba y yo ok, pues quería ver más y ya estábamos adelantados de tiempo. Yo decía como ven ya llegó la tela de mi mamá, ya llegó, pues mi tela donde está, la quiero volver a ver, entonces me decían que las telas estaban en el apartamento de John”, denunció la mujer al mencionado programa.
La mujer tenía su boda programada para agosto, pero al 29 de julio no tenía ni telas, ni vestido para su matrimonio. Aseguraron que durante el diseño, prueba y confección del vestido nunca hubo un pronunciamiento por parte del diseñador, y que la situación empeoró cuando se enteró que el vestido no iba a ser diseñado con la tela que inicialmente le prometió.
Las denunciantes afirmaron que pidieron la devolución del dinero en vista de que los vestidos nunca se entregaron: “Al final si nos reintegraron el dinero los $8 millones, lo que habíamos pagado entonces yo puse fue una denuncia”, indicó la mujer, que agregó que la denuncia fue por el incumplimiento del contrato, pues las mujeres soñaban con tener un vestido despampanante para el día del matrimonio; no obstante, tuvieron que conformarse con la improvisación de uno.
Al parecer, son más de tres casos en los que algunas clientas han sido víctima de los presuntos incumplimientos del reconocido diseñador. Por su parte, el señalado indicó al medio citado que se tratan de hechos aislados y no dio más declaraciones al respecto.