El general Federico Mejía confirmó inicio de protocolo para la liberación de 60 militares secuestrados en El Plateado

El general Federico Mejía, comandante del comando Específico del Cauca, confirmó que se inició el protocolo para la liberación de 60 militares retenidos por la comunidad en el municipio de Argelia, en el departamento del Cauca.

Según informó Noticias Caracol Ahora, los soldados serán trasladados a una zona montañosa para ser recogidos por un helicóptero perteneciente a las Fuerzas Militares.

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“Hablando con las comunidades, con todo el mundo, los militares se están conduciendo a una parte alta, ahí en el mismo sector, los vamos a evacuar en helicóptero y los vamos a reposicionar dentro del mismo cañón del Micay, o sea, las operaciones continúan más fuertes que nunca, se adelantarán las acciones judiciales que haya que hacer contra todas estas personas que de una u otra forma impidieron continuar con la labor que hace el soldado”, confirmó el general Mejía a Noticias Caracol Ahora.

El incidente ocurrió el viernes 18 de octubre, cuando dos pelotones que realizaban un patrullaje de seguridad en la región fueron interceptados por aproximadamente 300 personas. Este grupo retuvo a los militares en una zona rural entre los municipios de Argelia y El Tambo, en el sector conocido como El Filo.

El general Mejía detalló que, una vez liberados, los soldados serán reposicionados en la operación “Perseo”, que cuenta con la participación de 1.400 efectivos desplegados en el corregimiento de El Plateado, también en el Cauca. Esta operación busca garantizar la seguridad en una región afectada por conflictos y presencia de grupos armados.

La situación en esta zona del Cauca ha sido tensa debido a la presencia de grupos armados ilegales y conflictos con comunidades locales. La retención de los militares es un reflejo de las complejidades que enfrenta la región, donde las fuerzas del Estado buscan mantener el orden y la seguridad.

El proceso de liberación de los soldados es un paso importante para restablecer la normalidad en la zona y continuar con las operaciones de seguridad. Las Fuerzas Militares, con el apoyo de las autoridades locales, trabajan para asegurar que situaciones similares no se repitan y para fortalecer la presencia del Estado en áreas vulnerables.

En el sur del Cauca, cerca de Argelia, alrededor de 60 soldados del Ejército permanecen retenidos por la comunidad local desde el viernes 18 de octubre. Los uniformados fueron llevados a la escuela Nuevo Horizonte en el corregimiento La Emboscada por aproximadamente 300 campesinos, que buscan proteger su territorio de los enfrentamientos armados que afectan la región.

El general Federico Mejía, comandante del Comando Específico del Cauca, explicó que la operación militar en la zona, denominada Operación Perseo, tiene como objetivo recuperar territorios que han sido objeto de intimidación por parte de estructuras criminales. A pesar de las amenazas y la retención de los soldados, Mejía aseguró que las operaciones continuarán en el cañón del Micay. “Si nos sacan por la derecha ingresamos por la izquierda”, afirmó, subrayando la determinación del Ejército de seguir adelante con su misión.

Por su parte, Marcial Ruiz, líder social de la región, expresó la preocupación de la comunidad por los posibles enfrentamientos armados y el impacto negativo que estos podrían tener en su territorio. Ruiz destacó que la retención de los soldados es una medida para protegerse y evitar que el territorio sea dañado sin que se les ofrezcan alternativas viables. La comunidad ha solicitado al Estado que ceda el control de la vereda y no se desplace a otros territorios cercanos.

“No queremos un baño de sangre, porque es inminente los choques armados con los otros actores que están en el territorio y siempre quedamos en medio de los combates, por eso para protegernos, optamos por detener el avance de este contingente militar, además no queremos que vengan a dañarnos el territorio para que después se vayan, sin dejarnos alternativas”, indicó Marcial Ruíz.

En un intento por evitar un baño de sangre, las comunidades han instalado banderas blancas en la zona, buscando una solución pacífica al conflicto. Además, han enviado una carta al presidente de la República solicitando su visita al cañón del Micay para abordar la situación.

Mientras tanto, el Ejército espera la llegada de seis helicópteros para evacuar a los soldados retenidos, quienes llevan más de 12 horas en la escuela. La situación sigue siendo tensa, con la comunidad y las fuerzas militares en un delicado equilibrio de fuerzas.