Preocupación por minería ilegal en reserva natural en Antioquia: atribuyen el daño al Clan del Golfo

La reserva natural ubicada en el corregimiento La Piñuela, municipio de Corconá (Antioquia), que comprende el cañón del río Santo Domingo, y que conecta con el río Melcocho, considerado el más lindo del departamento por sus aguas cristalinas, está viviendo una seria amenaza por cuenta de prácticas ilegales que estarían creciendo en la zona.

De acuerdo con lo denunciado a El Colombiano, la maquinaria pesada y dragas para la extracción de material se han convertido en una constante en la reserva natural y sus alrededores, generando ruido, destrucción y una inminente e irreversible contaminación.

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Según el medio, el olor a diésel y gasolina ya está provocando efectos catastróficos en la fauna que antiguamente llegaba a refrescarse en las aguas y a alimentarse, como por ejemplo, las reconocidas nutrias.

La situación no cambia a la altura de la vereda Majagual, donde afirman que no es una sola draga la que opera, sino tres. Estas máquinas, según la denuncia, se dedican a extraer material de manera indiscriminada, en busca de pequeñas cantidades de oro, causando un severo impacto ecológico. La operación de estas dragas es realizada por hombres que manipulan la maquinaria sin “Dios ni ley”, sugiriendo que han estado trabajando por un periodo prolongado sin enfrentar ninguna clase de sanción o control, lo que agrava aún más el daño al entorno natural.

Todo empeora al acercarse a las veredas Santa Inés y Santa Cruz, donde la destrucción del ecosistema sería inminente por culpa de una retroexcavadora que opera sin control alguno. En ese lugar se comienzan a ver los pozos, agua estancada y oscura, producido a raíz de la minería ilegal.

El impacto causado por las dragas en la vereda Majagual se extiende a lo largo de más de cuatro kilómetros, según el medio citado, principalmente cerca del río, donde el paisaje ha quedado completamente devastado. Además, el sitio está invadido por bidones de gasolina dispersos sin precaución, lo que pone en riesgo la contaminación de las aguas del río. La presencia de estos bidones indica que las máquinas llevan semanas operando. En uno de los sitios, una retroexcavadora destruyó un nacimiento de agua, lo que ha provocado erosión en la montaña, deslizamientos y la formación de un lodazal donde antes había caminos de herradura.

El medio consultó con Javier Valencia, director de Cornare, autoridad ambiental de Antioquia, sobre si existen permisos para ejecutar estas prácticas en las veredas de La Piñuela, y su respuesta fue “no”.

“Hemos blindado las zonas del cañón del río Melcocho y del cañón del Santo Domingo, poniéndolas como áreas protegidas. Aunque hay que conocer bien los detalles detrás de esta denuncia, uno diría que en esa zona (en la que también está La Piñuela) no se puede ejercer la minería”, expresó el funcionario.

Esta problemática no ha sido denunciada ante las autoridades competentes, lo que ha permitido que los responsables afecten la reserva sin ninguna restricción o llamado de atención, teniendo en cuenta que en el corregimiento hay instalada una base militar del Ejército Nacional, donde tampoco han llegado siquiera los rumores del daño ambiental semejante que está ocurriendo a pocos kilómetros, según expuso el medio.

Entre tanto, el alcalde de Corconá, David Gómez, expresó que no tenía conocimiento de la situación, por lo que anunció acciones inmediatas para contrarrestar los actos delincuenciales. Del mismo modo, todo indicaría que estos actos criminales contra el medio ambiente los estaría ejecutando el grupo delincuencial Clan del Golfo, en medio de su expansión territorial para establecer la minería ilegal en la imponente reserva natural.

“Todo el mundo sabe que en El Melcocho y en el cañón del Santo Domingo están bregando a hacer aperturas de vías. Y aunque supuestamente dicen que esas aperturas son por parte de la comunidad, realmente es para el Clan meter la minería allá”, explicó un funcionario anónimo al medio reseñado.