Disidencias en el cañón del Micay quieren ubicar niños y mujeres embarazadas cerca a las tropas del Ejército para “facilitar” atentados

Según la inteligencia militar, los guerrilleros esperaban una congregación de 3.000 personas en el cañón del Micay para exigir apoyo contra la avanzada del Ejército, pero solo asistieron aproximadamente 150 personas

Guardar
El grupo armado al margen de la ley avanza en su intento de organizar a la población para enfrentar las acciones defensivas del Ejército en la región del Cauca - crédito Colprensa
El grupo armado al margen de la ley avanza en su intento de organizar a la población para enfrentar las acciones defensivas del Ejército en la región del Cauca - crédito Colprensa

En el cañón del Micay, en el departamento del Cauca, las tensiones se intensifican mientras las disidencias de las Farc, a través de la estructura Carlos Patiño, intentan movilizar a la población civil en medio de la operación militar Perseo.

Este grupo armado ilegal convocó a los campesinos de la región para darles instrucciones específicas sobre cómo actuar frente a las acciones de las Fuerzas Militares desplegadas en la zona, según ha denunciado el Ejército Nacional por medio de su cuenta oficial de X, antes Twitter.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.

“Denunciamos públicamente que la disidencia Carlos Patiño ha presionado a la comunidad de El Plateado #Cauca, principalmente a menores de edad y mujeres embarazadas para que sirvan de escudos humanos y obstruyan las operaciones militares. También han convocado asonadas e incitado agresiones contra nuestros soldados. Continuamos en el desarrollo de la operación Perseo apoyando a la comunidad y controlando el territorio”, afirmó el Ejército.

Así lo informó el Ejército nacional por medio de redes sociales - crédito captura de pantalla
Así lo informó el Ejército nacional por medio de redes sociales - crédito captura de pantalla

Durante la reunión, que tuvo lugar el 16 de octubre, se esperaba la asistencia de unas 3.000 personas, pero solo entre 150 y 200 acudieron al llamado. En este encuentro, los disidentes habrían instruido a la comunidad para que mujeres embarazadas y niños se ubicaran cerca de los vehículos blindados y tropas, con el objetivo de forzar el movimiento de los militares y facilitar ataques por parte del grupo armado, según la inteligencia militar citada por Semana.

Además, se les habría indicado a los campesinos que debían organizarse para resistir la presencia de las fuerzas del Estado y las inversiones del Gobierno nacional.

Investigaciones recientes subrayan la contaminación extendida en un río vital de la capital, vinculándola a actividades humanas - crédito Colprensa
Investigaciones recientes subrayan la contaminación extendida en un río vital de la capital, vinculándola a actividades humanas - crédito Colprensa

La estrategia incluiría la realización de congregaciones masivas y asonadas para obligar a las tropas a abandonar posiciones estratégicas, lo que permitiría a los disidentes recuperar el control de áreas previamente perdidas.

En el contexto de esta movilización, las disidencias también habrían entregado maquinaria amarilla bajo el pretexto de mejorar las vías terciarias, aunque en realidad se utilizaba para la explotación ilícita de yacimientos mineros en el río Micay, afectando el suministro de agua en la región, según el medio mencionado.

“En ese mismo sentido, les dijeron que la población civil debe ayudar a defender el territorio y sus recursos naturales. Hay que recordar que hace unas semanas las disidencias hicieron entrega de maquinaria amarilla para, supuestamente, ayudar al mantenimiento de las vías terciarias, cuando en realidad lo que estaban haciendo era actividades de explotación ilícita de yacimientos mineros sobre el río Micay, afectando la fuente hídrica de la que se surten los acueductos de esta región del sur del Cauca”, mencionó una de las fuentes consultadas por el medio mencionado, de manera extraoficial.

Este hallazgo plantea preocupaciones sobre la futura disponibilidad de agua potable y sugiere una urgente necesidad de regulación ambiental - crédito @FuerzasMilCol/X
Este hallazgo plantea preocupaciones sobre la futura disponibilidad de agua potable y sugiere una urgente necesidad de regulación ambiental - crédito @FuerzasMilCol/X

La situación se agrava con la presencia de artefactos explosivos instalados por las disidencias en caminos veredales, lo que ha llevado a muchos campesinos a optar por quedarse en sus hogares y continuar con sus labores cotidianas, evitando así el riesgo de desplazarse por áreas peligrosas.

Por otro lado, un audio conocido por las autoridades revela que los disidentes habrían ordenado el uso de menores de edad en acciones contra el Ejército, reconociendo qué civiles podrían morir en estos enfrentamientos. Este reconocimiento de la violencia y el desplazamiento forzado de la población civil subraya la complejidad del conflicto en el Cauca.

Las Fuerzas Militares han intensificado sus operaciones para recuperar el corregimiento de El Plateado

En el departamento del Cauca, al suroeste de Colombia, las Fuerzas Armadas han intensificado sus esfuerzos para recuperar el control del corregimiento de El Plateado, en el municipio de Argelia.

Esta región es un punto estratégico en el narcotráfico, ya que es un área clave para la recolección de pasta de coca, que luego se transforma en cocaína en el Cañón del Micay y se transporta hacia el mar Pacífico. La importancia de este territorio ha generado una intensa disputa debido a su relevancia en la economía ilícita.

Soldados del ejército colombiano patrullan este jueves por vías de acceso al municipio de Jamundí (Colombia). Un total de 100 policías llegaron este jueves a reforzar la seguridad en el municipio de Jamundí, la localidad del suroeste de Colombia que sufrió atentados terroristas a manos de las disidencias de las FARC y vive asediada por la violencia. EFE/ Ernesto Arias
Soldados del ejército colombiano patrullan este jueves por vías de acceso al municipio de Jamundí (Colombia). Un total de 100 policías llegaron este jueves a reforzar la seguridad en el municipio de Jamundí, la localidad del suroeste de Colombia que sufrió atentados terroristas a manos de las disidencias de las FARC y vive asediada por la violencia. EFE/ Ernesto Arias

Desde la madrugada del 12 de octubre, se ha puesto en marcha la Operación Perseo, una ofensiva militar que busca liberar a la población del control de las disidencias de las Farc, específicamente del grupo Carlos Patiño. La Tercera División del Ejército Nacional ha desplegado unidades especiales, aeronaves, artillería y vehículos blindados para enfrentar a los grupos armados ilegales que operan en la región.

A pesar de los desafíos, como los hostigamientos y la instalación de artefactos explosivos improvisados por parte de las disidencias, las tropas han logrado avanzar sin mayores contratiempos, según declaraciones del Ejército recogidas por Infobae. La operación busca restablecer el control en una zona que ha sido asediada por disidentes, quienes han mantenido una presencia significativa en el área.

El corregimiento de El Plateado ha sido un foco de violencia en los últimos meses, con un aumento significativo en los enfrentamientos armados. La operación militar actual es parte de un esfuerzo más amplio para estabilizar la región y reducir la influencia de los grupos armados ilegales en el narcotráfico.

Guardar