En El Plateado, Cauca, la población enfrenta un grave riesgo debido a la instalación de artefactos explosivos en diversas áreas del municipio, según denunció el Ejército Nacional.
Estos dispositivos han sido colocados en lugares críticos como las vías principales, viviendas, el colegio local e incluso el cementerio, lo que ha generado una situación de alarma entre los habitantes.
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El grupo responsable de estas acciones es la disidencia Carlos Patiño, que ha intensificado su actividad en la región. Además de los explosivos, han empleado señuelos para simular la presencia de subversivos, instalando cilindros en antiguas áreas campamentarias que están siendo desmanteladas por las tropas del Ejército.
La situación en Cauca se ha vuelto cada vez más tensa, con la población civil atrapada en medio de estas acciones que ponen en peligro su seguridad. Las autoridades han intensificado sus esfuerzos para desmantelar estos artefactos y asegurar la zona, pero el riesgo persiste mientras continúan las operaciones de los grupos armados.
El Ejército Nacional ha reiterado su compromiso de proteger a los ciudadanos y ha instado a la comunidad a mantenerse alerta y reportar cualquier actividad sospechosa. La presencia de explosivos en áreas tan sensibles subraya la necesidad de una respuesta coordinada para garantizar la seguridad de los habitantes de El Plateado.
Operación militar en El Plateado busca frenar violencia
En el municipio de El Plateado, ubicado en el departamento de Cauca, Colombia, se ha intensificado la lucha por el control de las rutas del narcotráfico y la propiedad de la tierra.
Esta región ha sido escenario de enfrentamientos entre disidencias guerrilleras, específicamente entre las facciones lideradas por Iván Mordisco y Márquez, conocido como la Segunda Marquetalia. En respuesta a esta situación, el gobierno del presidente Gustavo Petro ha lanzado la Operación Perseo, desplegando 1.400 efectivos de la fuerza pública para recuperar el control del área.
El corregimiento de El Plateado se encuentra estratégicamente situado en el Cañón de Micay, un corredor natural crucial para el tráfico de drogas desde Cauca y Nariño hacia las costas del Pacífico.
Esta ubicación ha convertido al municipio en un punto clave para las operaciones de grupos armados ilegales, quienes han mantenido su influencia en la región durante años. La operación militar actual busca desmantelar la presencia de alias Iván Mordisco, un líder guerrillero que ha consolidado su poder en la zona.
En 2021, El Plateado fue escenario de un ataque con explosivos que resultó en la muerte de un suboficial del ejército y heridas a siete soldados. Este incidente fue seguido por el asesinato de la gobernadora indígena Sandra Liliana Peña Chocue, un hecho que fue registrado en video y que evidenció la violencia que azota la región.
En ese mismo año, altos funcionarios del gobierno, incluyendo al Alto Comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, y el Ministro de Defensa, Diego Molano, visitaron el municipio de Argelia, también en Cauca, para abordar el impacto del conflicto.
La situación en El Plateado refleja la complejidad del conflicto armado en Colombia, donde el control territorial y las rutas del narcotráfico son factores determinantes en la lucha entre grupos ilegales y el Estado. La intervención del gobierno busca no solo restablecer el orden, sino también reducir la influencia de estos grupos en una región históricamente afectada por la violencia.
La operación militar contra grupos ilegales en Cauca
En 2021, este lugar fue escenario de un ataque con explosivos que dejó un suboficial del ejército muerto y siete soldados heridos. Este tipo de incidentes ha llevado al gobierno colombiano a tomar medidas drásticas para recuperar el control de la región.
El presidente Gustavo Petro ha lanzado la Operación Perseo, un despliegue de 1.400 efectivos de la fuerza pública en la zona, con el objetivo de desmantelar la influencia de alias Iván Mordisco, un líder guerrillero que ha mantenido su presencia en el área. Esta operación busca no solo reducir la violencia, sino también retomar el control de las rutas del narcotráfico y la propiedad de la tierra, que son fuentes de conflicto en la región.
En 2021, tras el asesinato de la gobernadora indígena Sandra Liliana Peña Chocue, las autoridades colombianas, incluyendo al Alto Comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, y el Ministro de Defensa, Diego Molano, se desplazaron a Argelia, otro municipio afectado por el conflicto. Este tipo de visitas gubernamentales busca mostrar el compromiso del Estado con la seguridad y la paz en la región.
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