Cayó banda dedicada a la trata de personas en Cúcuta: reclutaban menores de edad para grabar contenido sexual

Uniformados de la Policía Metropolitana de Cúcuta anunciaron la desarticulación de una red dedicada a la trata de personas en concurso de pornografía infantil, integrada por cinco personas.

Según el reporte oficial, la captura se dio en una vivienda del barrio Comuneros de la capital nortesantandereana, tras el aviso de un ciudadano que reportaba el ingreso y la salida de menores de edad del inmueble. En medio del operativo, también fueron rescatadas cinco menores de edad.

“Bajo el trabajo que viene realizando nuestra policía de infancia y adolescencia, en coordinación con la Fiscalía, ICBF y el GOES, se logró la captura de cinco personas que venían realizando estos delitos contra menores de edad y trata de personas en concurso con pornografía infantil, donde fueron rescatadas cinco menores de edad también, en el barrio Comuneros de la ciudad de Cúcuta”, informó el coronel William Quintero, comandante de la Policía Metropolitana de Cúcuta en una rueda de prensa.

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El oficial aseguró que la investigación tuvo una duración de una semana, y agregó que “gracias a la información oportuna de la comunidad, quienes indicaron que habían visto que a esta vivienda entraban continuamente menores de edad, dieron aviso a la autoridad y por eso se logró estás capturas”.

Así mismo, las autoridades informaron que fueron incautados 32 elementos a los detenidos, entre los cuales se destacan doce teléfonos celulares, un computador portátil y un DVD, que serán analizados por especialistas informáticos para determinar la existencia de más víctimas de este flagelo.

Entre los detenidos, se encuentra Waldo Enrique Miranda Carreño, conocido con el alias de Alejandro, quien sería el presunto líder de la organización, y estaría encargado del reclutamiento de las menores, a través de las redes sociales.

También, fueron capturados Alexander Adolfo Torres y Deisy Liliana Castro que, según la investigación de la Policía Metropolitana, eran los encargados de administrar las finanzas, así como la búsqueda de niñas, recurriendo a promesas salariales.

Finalmente, las autoridades identificaron a Diego Alejandro Vielma Márquez y Edmir González Palacios, quienes eran los que interactuaban con las menores de edad en las redes sociales. De acuerdo con la investigación, la red buscaba que sus clientes potenciales fueran provenientes de Estados Unidos.

Los detenidos fueron dejados a disposición de las autoridades competentes, donde fueron procesados por los delitos mencionados, y al no aceptar los cargos, un juez de control de garantías les dicto medida de aseguramiento en centro penitenciario y carcelario.

Este no ha sido el único operativo adelantado contra este delito, durante el presente año, en la ciudad de Cúcuta. En el mes de agosto, la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (Dijín) de la Policía, en colaboración con Interpol y Europol, lograron la captura de dos mujeres, una colombiana y otra de nacionalidad venezolana, que estarían involucradas en la venta de material pornográfico infantil.

Según la investigación, el contenido de este material era particularmente perturbador, ya que incluía imágenes y videos de una niña de ocho años, que es hija de una de las detenidas.

Además, la institución policial detalló que se identificaron transacciones internacionales que vinculaban el contenido a compradores en países como Italia, Francia y Estados Unidos.

A su vez, las autoridades descubrieron que el material era vendido a precios que variaban entre 250 y 500 dólares por video o fotografía. Esta información fue confirmada tras el análisis detallado de los registros financieros y las redes sociales de las involucradas.

“Se logró la captura de estas dos mujeres, el rescate y el restablecimiento de derechos de la menor de edad. Se tiene conocimiento que este material era consumido por ciudadanos italianos, franceses y norteamericanos”, señaló el coronel Edwin Urrego, director de la Dijín e Interpol de la Policía.

Tras la captura de las dos personas, la menor fue puesta bajo la protección del Instituto Colombiano del Bienestar Familiar (Icbf) donde se recuperaron sus derechos.