El alcalde mayor de Bogotá, Carlos Fernando Galán, se refirió a la preocupante situación hídrica de la ciudad y las posibles acciones a tomar. En la próxima cumbre, se decidirá si se declara una situación de desastre, como lo propone el presidente Gustavo Petro, para implementar medidas extraordinarias, o si se sigue con las leyes y normas vigentes, opción respaldada por Galán.
En entrevista con El Tiempo, el mandatario local explicó que el embalse de Chuza, que tiene una capacidad de 220 millones de metros cúbicos, está solo al 33 % de su capacidad, un nivel “sumamente bajo” para esta época del año, cuando debería estar por encima del 70 %, según Galán. Esta situación ha obligado a la ciudad a mantener las actuales medidas de racionamiento de agua.
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Carlos Fernando Galán también detalló el concepto del “día cero”, que se refiere al momento en que el nivel combinado de los embalses de Chuza y San Rafael caiga al 36 %. Actualmente, el nivel está en 43 %, pero si desciende aún más, será necesario imponer un racionamiento más severo. Esto podría implicar que en lugar de una sola zona en racionamiento diario, se incluyan dos zonas, afectando a más sectores de la ciudad.
El mandatario indicó que la tendencia a la baja en los niveles de agua se ha frenado, y en algunos días incluso se ha registrado un leve aumento. Sin embargo, enfatizó que las lluvias prometidas son cruciales para recargar los embalses.
A corto plazo, Bogotá ya está captando cerca de ocho metros cúbicos por segundo de agua y se espera que, con la autorización de la CAR, esa cifra aumente a nueve metros cúbicos por segundo con el fin de reducir la presión sobre el embalse de Chingaza.
Gobierno Petro insistió en declarar crisis por agua en Bogotá
Al finalizar una reunión entre el Gobierno nacional, en cabeza del presidente Gustavo Petro, y el alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, la ministra de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Susana Muhamad, anunció que se inició un trabajo conjunto con el Distrito para tomar acciones que permitan enfrentar la crisis de agua en la ciudad, y para ello se evalúa una posible declaratoria de desastre.
“Hemos iniciado un trabajo conjunto para establecer un acuerdo entre el Distrito y el Gobierno Nacional sobre el futuro del agua a corto, mediano y largo plazo. Eso implicará tomar medidas que tienen que ver con una posible declaratoria de desastre y que tendrán implicaciones durante el siguiente año; también, medidas de largo plazo en una mesa permanente”, aseguró la ministra de Ambiente.
De igual forma, Susana Muhamad afirmó que esta situación no es coyuntural, sino sistemática y que, por esa razón, se deben tomar medidas urgentes para evitar que esta situación se profundice en el tiempo.
La jefe de la cartera de Ambiente afirmó que en la semana del 14 de octubre de 2024 se anunciarán una serie de medidas de corto plazo para los meses que vienen, medidas regulatorias sobre el uso eficiente del agua en la región para enfrentar esta situación y que, a futuro, sea un territorio resiliente ante los efectos de la crisis climática.
“Hemos reconocido, cruzando la información de ambas instancias, la realidad de que estamos en un momento que podríamos llamar de vulnerabilidad climática para el agua de Bogotá”, destacó Muhamad tras el encuentro entre todas las partes.
La ministra Susana Muhamad aseguró que el análisis del Distrito y el Gobierno son similares en ese proceso de abordar esta vulnerabilidad y poder sobrepasar esta temporada de sequía, aprovechar la lluvia que se prolongará hasta diciembre y lograr un equilibrio entre el sistema de abastecimiento de Bogotá y la demanda.