Capturaron a “narco invisible” que tenía una casa de lujo en Chocó: trabajaba con el Clan del Golfo

Las autoridades colombianas informaron en la mañana de este domingo 13 de octubre sobre la captura de alias Poncho, un poderoso narcotraficante conocido por su habilidad para evadir a las autoridades durante meses, y que cayó en una operación conjunta entre la Dirección de Investigación Criminal de la Policía y el Ejército Nacional.

Alfonso Meléndez Ballesteros es señalado por las autoridades de ser una figura clave en el transporte de cocaína desde Colombia hacia Estados Unidos. Según información de inteligencia, alias Poncho residía en la zona rural del municipio de Acandí, donde, según las investigaciones, acumuló una considerable riqueza gracias al narcotráfico.

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Las autoridades lo vinculan con la subestructura Efrén Vargas Gutiérrez, un brazo armado del Clan del Golfo que opera en las costas del Pacífico. Este grupo criminal controla el tráfico de drogas en la región, imponiendo su autoridad sobre las rutas utilizadas para el envío de estupefacientes.

Con la captura de ‘Poncho’, los oficiales aseguraron que le propinaron un duro golpe al Clan del Golfo, ya que se le atribuye la responsabilidad de coordinar el transporte de cocaína mediante lanchas rápidas, conocidas como “go fast”, desde el Chocó hacia Centroamérica, principalmente a Panamá y Costa Rica, antes de llegar a Norteamérica.

“Delinquía mediante alianza criminal con el grupo armado organizado, subestructura ‘Efrén Vargas Gutiérrez’ y sería la responsable del envío de más de dos toneladas de clorhidrato de cocaína hacia Centroamérica con destino final los Estados Unidos de Norte América”, señala el informe oficial.

El Clan del Golfo, bajo el liderazgo de alias Chiquito Malo, ha extendido sus operaciones más allá del narcotráfico, involucrándose en actividades como la extorsión, el tráfico ilegal de migrantes y la extracción ilícita de minerales. Este grupo ha mantenido un control férreo sobre la región, cobrando impuestos a otros narcotraficantes que desean utilizar sus rutas.

La captura de Poncho se llevó a cabo con la colaboración de la Fiscalía General de la Nación y la Agencia Antidrogas de los Estados Unidos (DEA), reforzando la cooperación internacional en la lucha contra el narcotráfico.

Entretanto, las autoridades colombianas han dejado a Poncho a disposición de la Fiscalía, a la espera de su extradición a Estados Unidos, donde enfrentará cargos por narcotráfico y concierto para delinquir.

En una operación reciente, las Fuerzas Militares de Colombia descubrieron un ingenioso método de ocultamiento de drogas utilizado por el Clan del Golfo. En las selvas del Pacífico chocoano, cerca del corregimiento de Guarín en el municipio de Juradó, las autoridades incautaron 1,5 toneladas de clorhidrato de cocaína escondidas dentro de un árbol de ceiba. Este hallazgo, realizado el 11 de octubre, representa un golpe a las finanzas del grupo criminal, según informaron las autoridades.

La droga, valorada en más de 52 millones de dólares, estaba oculta en el interior de un árbol de más de cinco metros de altura. Los miembros del Clan del Golfo habían perforado el árbol para evitar la detección por parte de las autoridades, según detallaron las Fuerzas Militares.

Este árbol, situado cerca de un estero, servía como depósito ilegal desde donde la cocaína sería transportada en embarcaciones hacia Centroamérica.

La operación fue llevada a cabo por unidades de la Armada de Colombia, adscritas a la Fuerza de Tarea Conjunta Titán. Durante la intervención, las tropas tuvieron que escalar el árbol y descender en su interior para extraer los 56 sacos que contenían la sustancia ilícita. Este procedimiento requirió una maniobra compleja debido a la altura y las condiciones del entorno selvático.

Tras la extracción, el material fue trasladado a través de la densa selva y los esteros hasta el municipio de Bahía Solano. Allí, personal del Cuerpo Técnico de Investigación continuó con el proceso de manejo de la evidencia.