Durante tres décadas Natalia París se ha mantenido como un referente del entretenimiento en Colombia. La antioqueña destacó a lo largo del tiempo en sus facetas de DJ, de modelo, de empresaria y hasta como creadora de contenido, manteniéndose vigente a pesar del paso del tiempo y entre generaciones muy distintas.
Como figura pública no estuvo exenta de controversias, en particular en lo que se refiere a sus parejas sentimentales. Desde su primera relación conocida, la que mantuvo con el narcotraficante Julio César Correa (conocido bajo el alias de Julio Fierro, asesinado en 2001 y padre de su hija Mariana), pasando por la que tuvo con Juan ‘El Gato’ Baptista que terminó debido a una infidelidad del actor venezolano, la vida sentimental de la antioqueña permanece en la mira de los medios y de los usuarios en redes sociales.
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La relación más reciente fue con Rafael Duarte, que se venía desempeñando como su manager y con el que se dejó ver como su pareja desde abril de 2021. Pese a que era 15 años menor que Natalia, la pareja parecía verse en armonía tanto en el trabajo como en su vida privada, hasta que en enero de 2024 se anunció que habían terminado.
Durante una reciente entrevista en el programa Cómo Amaneció Bogotá de la emisora Tropicana, en donde habló distintos aspectos de su vida personal y profesional, incluyendo sus inicios en el modelaje protagonizando los comerciales de la hoy desaparecida cerveza Cristal Oro, sus inicios como DJ y hasta de su hija Mariana, de la que reveló que se está preparando para lanzarse como cantante.
La paisa se refirió a la separación y admitió que le dejó una lección importante. “Había que cortar por lo sano y ahora tengo otro mánager. Es lo mejor, es lección aprendida. Cuando tengas tu carrera o tu negocio, no hay que meter a tu pareja ahí porque es como mucha revoltura (…) Cuando terminas, toda esa revoltura de cosas no ha sido tan fácil”, reveló, pues en el momento en que se anunció la ruptura, la propia modelo señaló que Duarte seguiría como su mánager.
Cuando le preguntaron por qué no se había casado en todos estos años, Natalia comentó que nunca le interesó la idea. “Me hubiera casado si hubiera soñado con el matrimonio, porque uno manifiesta y lo que uno quiere lo hace. Pero es que me encanta vivir sola, la independencia, vivir con mi novio los fines de semana y tener mi espacio”. Añadió que no se caracteriza por ser una persona rumbera, pese a que aparece con frecuencia en fiestas. “Yo estoy trabajando, y el man que llegue a mi vida tiene que ser 100% seguro y que no sufra porque estoy un fin de semana en Cancún, o en una fiesta”, afirmó.
Sobre el motivo por el que se distanció con Rafael Duarte, Natalia apuntó en Tropicana que los estilos de vida tan distintos terminaron por distanciarlos y precipitar la ruptura. “A él sí le gustaba mucho la rumba, entonces eran 2, 3 y 4 de la mañana y yo le decía: bueno ya, a dormir. Él decía otro ratico y le respondía ‘ok, quedate’. Pero todos los fines de semana siempre estábamos trabajando, y no podíamos estar a toda hora en fiesta, fiesta, fiesta”, expresó.
Parte de la charla se centró en que las parejas de la antioqueña son menores que ella. Cuando le preguntaron por la razón, Natalia Paris afirmó que no es algo que busque de manera consciente. “El universo me los ha traído así”, aseguró.