Lujoso conjunto residencial donde alias Pichi cumplía su condena guarda un oscuro pasado

Polémica generó la fuga de un reconocido narcotraficante santandereano, conocido incluso como el Pablo Escobar de esa región del país, llamado Óscar Camargo Ríos, alias Pichi. Y no precisamente por el acto de evadir a la justicia en esta ocasión, sino porque con esta serían 14 veces las que el delincuente violó las condiciones de casa por cárcel que purgaba en un inmueble en Medellín (Antioquia), del cual se cambió en varias ocasiones sin previo aviso.

A pesar de los funcionarios del Instituto Nacional Penitenciario y Cárcelario (Inpec), que estaban al frente de su caso, notificaron en reiteradas ocasiones las “escapaditas” que datan del 16 de julio al 9 de agosto de 2024; según reseñó Semana, el juez tercero de ejecución de penas de Medellín no habría tomado decisiones al respecto.

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Tras omitirse una y otra vez las señales que advertían que el delincuente no acataba las normas restrictivas de su detención domiciliaria, finalmente, al mediodía del jueves 10 de octubre, se confirmó la revocatoria del beneficio de casa por cárcel. En ese sentido, “Pichi” debía ser recapturado de inmediato. Sin embargo, al intentar ejecutar la orden, las autoridades del Inpec descubrieron que se había fugado. Para las 5:00 p. m. “Pichi” se había aprovechado, una vez más, del beneficio judicial para escapar.

De acuerdo con lo que conoció Blu Radio, alias Pichi vivía en la casa 101 de la unidad residencial Alcázar de la Serranía, ubicada en la calle 2 sur #20-211, en el barrio El Poblado de Medellín. Allí convivía con su novia, de quien tampoco se tendría conocimiento de su ubicación.

Según lo que pudo establecer el medio citado, es que dicho inmueble estuvo involucrado en un ilícito el 18 de abril de 2024, pues fue en ese lugar donde Zhan Lui, un presunto abusador sexual de 42 años, de origen chino, fue sorprendido con una mujer de 21 años llamada Leidy Johanna Marín y con una niña de tan solo 14 años, presuntamente, a quien iban a inducir a la prostitución.

Este caso también fue objeto de polémica luego de que el juez 40 de control de garantías no legalizara el procedimiento contra los adultos, permitiendo así su posterior libertad.

Cabe destacar que, vecinos habían denunciado que la vivienda era utilizada para encuentros sexuales, algo que era objeto de investigación. Asimismo, el medio conoció que Pichi tenía un contrato firmado desde agosto y había solicitado un cambio de residencia a Alcázar de la Serranía a finales de julio.

Óscar Camargo Ríos es un cabecilla criminal vinculado a la banda Los San Rafa, y es reconocido como una figura central del narcotráfico y la violencia en el país. Su historial delictivo incluye más de una década de investigaciones por tráfico de drogas y enfrentamientos por el control de las rutas del alucinógeno.

Fue capturado por primera vez en 2015, no obstante, su fuga de la Penitenciaría de Palogordo fue un golpe para las autoridades, quienes lo recapturaron en 2018 tras una operación en Medellín. A pesar de los cargos, en 2019 recibió prisión domiciliaria, lo que le permitió continuar con sus actividades criminales, generando más de $14 mil millones al año.

Encarcelado nuevamente en 2021, su influencia en el mundo del microtráfico no decayó, especialmente en Bucaramanga, donde continuó disputando el control territorial contra la banda rival Los del Sur, liderada por alias Poporro, también condenado. Su liberación bajo prisión domiciliaria a mediados de 2024 encendió nuevamente las alarmas por su capacidad de mantener el control sobre las redes delictivas desde la distancia.