Conozca tres recetas que no pueden faltar en la cocina colombiana en el Día Mundial del Huevo

El Día del Huevo es una celebración que resalta la importancia de este alimento en nuestra dieta y su versatilidad en la cocina. Los huevos son un componente fundamental en muchas culturas culinarias y ofrecen una amplia gama de beneficios nutricionales.

Este alimento es una excelente fuente de proteínas, que son esenciales para la reparación y construcción de tejidos en el cuerpo. Cada huevo contiene aproximadamente 6 a 7 gramos de proteína, incluyendo todos los aminoácidos esenciales necesarios para el funcionamiento adecuado del organismo. Además, este alimento es rico en vitaminas como la B12, la riboflavina y la vitamina D.

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También aporta minerales esenciales como el selenio y el fósforo. La vitamina D, en particular, juega un papel importante en la salud ósea y la función inmunológica. Aunque los huevos contienen colesterol, la mayoría de los estudios recientes sugieren que su consumo moderado no está asociado con un aumento en el riesgo de enfermedades cardíacas. También, los huevos contienen grasas saludables, incluyendo ácidos grasos omega-3, especialmente en los huevos de gallinas alimentadas con una dieta rica en estos ácidos.

Además, los huevos son una fuente de antioxidantes como la luteína y la zeaxantina, que son beneficiosos para la salud ocular. Estos compuestos ayudan a proteger los ojos de enfermedades relacionadas con la edad, como la degeneración macular y las cataratas. En cuanto a su importancia en la dieta, los huevos se pueden preparar de múltiples formas: hervidos, fritos, revueltos, al horno, entre otras. Esta versatilidad los convierte en un ingrediente ideal para una variedad de platos, desde desayunos hasta cenas.

A menudo, son una opción de proteína más asequible en comparación con otras fuentes de proteína, como la carne o el pescado, lo que los convierte en una opción accesible para muchas familias. A pesar de ser un alimento altamente nutritivo, los huevos son relativamente fáciles de almacenar y tienen una vida útil prolongada, lo que facilita su inclusión regular en la dieta. Además, la inclusión de huevos en la dieta puede contribuir a una alimentación equilibrada, ayudando en la pérdida de peso, el desarrollo muscular y el mantenimiento de la salud en general.

La versatilidad de los huevos en la cocina permite una amplia gama de recetas que van desde las clásicas tortillas hasta sofisticados platos al horno. Una de las combinaciones más emblemáticas de la gastronomía colombiana es la arepa huevo, una deliciosa fusión que une la tradicional arepa con el sabor y la riqueza del huevo en el Caribe colombiano.

Ingredientes:

• 1 taza y ½ de harina de maíz.
• 1 taza y ½ de agua.
• 10 huevos.
• Sal al gusto.
• Aceite para freír.

Instrucciones:

Para comenzar, mezcle la harina de maíz con el agua y una pizca de sal en un tazón grande. Amase bien los ingredientes hasta obtener una masa homogénea y suave. A continuación, divida la masa en porciones y forme bolas del tamaño de una pelota de golf.

Luego, cubra dos tablas de cocina con film plástico. Coloque una bola de masa en una de las tablas y, utilizando la otra tabla, aplane la masa para crear una arepita de aproximadamente un centímetro de grosor.

En una sartén, caliente suficiente aceite a fuego medio-alto. Cuando el aceite esté caliente, coloque la arepa en la sartén. Con la ayuda de una espumadera, sumérjala ligeramente en el aceite caliente, bañándola para que se infle. Una vez que esté dorada, retírela del aceite.

Haga un pequeño hueco en la parte superior de la arepa con cuidado. En un recipiente con pico, rompa un huevo y agréguele una pizca de sal. Vierta el huevo en el hueco de la arepa. Si es necesario, cubra el huevo con un poco más de masa. Finalmente, fría la arepa durante un minuto por cada lado, asegurándose de que esté bien cocida y dorada. Sirva caliente y disfrute de esta deliciosa delicia colombiana.

Ingredientes:

• 4 huevos frescos.
• ½ pulgada de agua (aproximadamente).
• 1 pizca de sal.
• 1 chorrito de vinagre blanco.

Instrucciones:

Prepare el agua: llene una olla con agua caliente, aproximadamente ½ pulgada de profundidad. Asegúrese de que sea una olla con revestimiento antiadherente pero sin teflón. Lleve el agua a ebullición a fuego medio.

Añada condimentos: una vez que el agua esté hirviendo, agregue una pizca de sal y un chorrito de vinagre blanco. Luego, baje el fuego para que el agua apenas burbujee suavemente.

Agregue los huevos: rompa los huevos con cuidado directamente sobre el agua. Evite llenar demasiado la olla para que los huevos tengan suficiente espacio.

Cocine los huevos: tape la olla y deje que los huevos se cocinen por unos 2 minutos. Revise si las claras están completamente cocidas. Si no es así, utilice una cuchara para verter un poco de agua caliente sobre las claras hasta que se cocinen por completo.

Verifique la cocción: los huevos estarán listos cuando las claras estén opacas y bien firmes, pero las yemas permanezcan suaves.

Sirva: con una espátula, separe los huevos si las claras se pegaron entre sí. Levante cada huevo cuidadosamente y colóquelo en un plato caliente. Sirva de inmediato.

Ingredientes para hacer huevos benedictinos:

• 1 brioche o rebanadas de pan grueso
• 1 huevo (para el huevo pochado)
• 2 yemas de huevo a temperatura ambiente
• 125 gramos de mantequilla
• 1 cucharada de zumo de limón
• Embutido (loncha de jamón cocido, jamón serrano o bacon)
• Sal
• Pimienta
• Vinagre

Instrucciones:

Comience tostando los panecillos: utilice un brioche o un pan grueso. Evite el pan de molde, ya que con todos los ingredientes que lleva encima, podrían romperse.

Clarifique la mantequilla: derrita la mantequilla en un cazo a fuego lento.

Retire la espuma: deje que aparezca una especie de espuma en la capa superior. Esta es el suero de la leche que deberá retirar.

Elimine las impurezas: retire la espuma y asegúrese de quitar también cualquier impureza que pueda quedar en el fondo.

Bata las yemas de huevo: en un recipiente, bata las dos yemas de huevo.

Incorpore la mantequilla: añada la mantequilla derretida en forma de hilo mientras emulsionan con una varilla. Cuando obtenga una textura cremosa, agregue el zumo de limón y sazone con sal y pimienta.

Cocine el bacon: pase el bacon por la plancha y reserve.

Prepare el huevo escalfado: caliente agua en una olla con un chorrito de vinagre.

Cree un remolino: haga un remolino en el agua con una cuchara y, con cuidado, eche el huevo. Deje cocinar a fuego bajo durante 5 minutos

Retire el huevo: saque el huevo escalfado y colóquelo sobre un papel absorbente para eliminar el exceso de agua.

Monte el plato: coloque el pan tostado, el bacon crujiente, el huevo escalfado y vierta la salsa por encima. Sirva de inmediato.