El pasado 8 de octubre, en horas de la noche, se presentó un hecho de sicariato al interior de un consultorio odontológico en el centro de la ciudad de Cúcuta, en el norte de Santander.
En el hecho, dos personas resultaron heridas tras el ataque de hombres que se movilizaban en una motocicleta y portaban armas de fuego. Las víctimas fueron identificadas como Jonathan Bonaldy y Jasbleydi Manrique Acevedo. Debido a la gravedad de sus heridas, la mujer falleció en el centro asistencial al que fue remitida, mientras que el hombre, de nacionalidad extranjera, se recupera en la institución.
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De acuerdo con declaraciones de las autoridades, este hombre se dedicaba al negocio de compraventa de vehículos, actividad que realizaba entre Venezuela y Colombia. En principio, no se tenía conocimiento de ningún tipo de amenaza o indicio que señalara que se trataba de un ataque premeditado.
Sin embargo, a medida que avanzaban las investigaciones y de acuerdo con las entidades judiciales encargadas del caso, tal como lo informó el portal La Opinión, se descubrió que el hombre era el blanco del acto criminal, y no la esteticista, quien solo se encontraba en el lugar por una cita de rutina.
“Tenemos clarísimo que el objetivo del ataque era él, y ella terminó siendo una víctima en todo esto”, aseguró una fuente judicial.
Inicialmente, las autoridades tenían conocimiento de que Jonathan llevaba solo 15 días en la ciudad. No obstante, tras una investigación más exhaustiva, lograron identificar que tanto él como su acompañante estaban radicados desde hace varios meses en una vivienda ubicada en el sector de Boconó. Además, se comprobó que el hombre se desplazaba en una camioneta blindada.
“Lo que nos manifiestan es que es un empresario dedicado a la compra y venta de vehículos, pero realmente no sabemos mucho más sobre él. En el momento del ataque, llevaba consigo una suma en efectivo que ascendía a veinte millones de pesos. Estamos indagando si es requerido en Venezuela”, agregó el medio de comunicación.
Respecto a los hechos, ese día el teniente coronel Julio Olaya, comandante operativo de seguridad ciudadana de MECUC, ofreció las siguientes declaraciones: “Las primeras hipótesis o la información que recibimos en el lugar de los hechos indican que un sujeto en una motocicleta llegó y disparó desde fuera del lugar. El disparo impactó primero a un hombre y luego a una mujer. Las dos personas fueron trasladadas a un centro asistencial; al llegar, la mujer falleció, y el hombre está siendo sometido a procedimientos médicos”.
Tras el incidente, que ha conmocionado a la comunidad, los habitantes de la ciudad han hecho un llamado a las autoridades locales a través de las redes sociales, solicitando al alcalde que implemente medidas más estrictas para prevenir actos de violencia.
La víctima, una mujer que era madre, esposa y trabajadora, también practicaba atletismo en su tiempo libre. Había consolidado su negocio de estética, siendo reconocida como “pionera en cejas”. A pesar de tener estudios en ingeniería biotecnológica, el mundo de la belleza la atrajo, y desde entonces había construido una sólida reputación en el gremio, que le permitió asistir a capacitaciones en ciudades como Barcelona, Punta Cana y en México.
La mujer tenía dos hijos, uno de 15 años y otro de tan solo 16 meses. Así la describió una de sus familiares: “Era una madre, hija, prima, amiga, hermana y esposa excepcional, amorosa, noble. Dios mío, si nos ponemos a describirla nunca acabaríamos. Ella era un ser maravilloso, y nos lo arrebataron”, relató una prima.