Una niña de 12 años, de Neiva (Huila), habría sido agredida sexualmente por un hombre desconocido que pagó por $600.000 por ello, en medio de un supuesto viaje a otra ciudad que tenía fines turísticos. Estaba bajo el cuidado de Alix Tatiana Rivas, una vecina de su abuela que aseguró poder hacerse cargo de la ella en determinados días.
Estos hechos se presentaron en diciembre de 2022, pero fueron revelados hasta ahora a los medios de comunicación- El 13 de diciembre de ese año, la mamá de la víctima –llamada María para proteger su verdadera identidad– instauró la denuncia en la Unidad de Reacción Inmediata (URI) de Neiva, en contra de la vecina, que era vendedora de empanadas, y del hombre que habría abusado de ella: José Calderón Pinzón, un hombre de 45 años, casado, y que ejercía como técnico de reparación de celulares.
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María decidió confiar en la vecina de su madre (abuela de la menor) y le permitió cuidar de su hija en varias ocasiones. “Yo la dejé con la vecina pensando que ella realmente iba a actuar de buena fe y no, nunca fue así. Ella actuó de mala fe, terminó vendiendo a mi hija”, aseguró la mujer, en el programa Séptimo Día.
Esto pasó cuando su mamá empezó a enfermar. Pues, en vista de que necesita ciertos cuidados, María envió a su hija a la casa de la abuela para que pudiera estar pendiente de ella los fines de semana, y verificar su estado de salud. Así lo hizo durante más de cinco meses. En ese tiempo, de manera ocasional, Alix Tatiana Rivas, se hacía cargo de la niña y, además, se la llevaba a trabajar. “Empezó a sacarme a la niña, que fuera a trabajar con ella, que para que tuviera plata”, contó la madre de la víctima en el programa.
Fue así como su hija empezó a pasar más tiempo con la señalada agresora, que supuestamente la llevaba con ella para ganar dinero trabajando. Pero, tiempo después, la vecina insistió en que le permitieran viajar con la niña a otra ciudad, para que pudiera conocerla. A pesar de que María sintió desconfianza, la mujer la convenció: “No, tranquila, que va es conmigo, no es con otra persona”, dijo la mujer.
El viaje de turismo terminó siendo una mentira. La madrina de la víctima recibió una llamada en la que le informaron que la menor estaba cerca de Medellín y que había sido llevada a un centro de salud para que le insertaran en el brazo un dispositivo que funciona como anticonceptivo, y así evitar que quedara embarazada. Además, fue informada de que, presuntamente, la menor había sido vendida a un hombre que abusó sexualmente de ella.
María se enteró de lo ocurrido y confrontó a la mujer por teléfono; le preguntó si, en efecto, había instado a su hija a utilizar un método de planificación. “Dijo: ‘Sí, antes agradezca que yo se la puse a planificar porque así se evita un embarazo’”, contó la mujer a Séptimo Día. Entonces, le ordenó que le regresara a la niña, o si no, se vería obligada a denunciarla.
La niña fue abandonada en un terminal de Medellín y su familia la llevó a hacerse exámenes médicos que confirmaron el abuso sexual. De acuerdo con la víctima, accedió a estar bajo el cuidado de la vecina porque quería trabajar. Y, en el viaje, accedió a planificar, pero se negó a tener relaciones sexuales con hombres, sobre todo, cuando supo que había otro sujeto al que estaban evaluando para que abusara de ella. “Ella en lugar de decirme: eso está mal, no hagas esto, eres una niña, trabajas honradamente, ella me hundía más”, aseveró.
Alix Tatiana Rivas fue capturada en 2023 como presunta responsable de explotación sexual con menor de 18 años, mientras que José Calderón Pinzón no pudo ser capturado y, a día de hoy, está prófugo. Se le señala de haber cometido el delito de acceso carnal abusivo con menor de 14 años.