Tras el accidente que dejó varios estudiantes de auxiliar de clínica veterinaria fallecidos, luego de que el bus en el que se transportaban perdiera el control y se volcara en en la vía Bogotá-La Mesa, Cundinamarca, varios sobrevivientes relataron cómo se vivieron los momentos previos al siniestro.
En Noticias Caracol, María Dayana Bernal, una de las estudiantes que salió con vida tras el impacto, narró que en un momento el vehículo empezó a oler a quemado, antes de la curva tomó mucha velocidad y no alcanzó a maniobrar.
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“Iba tratando de dormir cuando siento un olor muy fuerte a quemado, pero yo no le di tanta importancia. Solo fue cuando yo sentí que todos estaban gritando, mucha gente moviéndose, entonces mi reflejo fue levantarme y cuando me levanté vi que estábamos bajando muy rápido y el señor no frenaba”, dijo Dayana, quién aseguró que en medio de un intento por conciliar el sueño se desató el caos dentro del bus. Su último recuerdo es que el conductor les grito que se habían quedado sin frenos.
Según la joven, la salida se realizó a las 6:30 a. m. por Mosquera sector en el que se presenta alto flujo vehicular, pero tenia conocimiento que Bojacá, al municipio que se dirigían no era lejos, sin embargo, una de sus compañeras le pregunto que porque se demoraban tanto, que si de pronto estaban perdidos, todos los jóvenes se dispersaron para descansar y fue en ese momento que empezó el olor a quemados.
Se acuerda hasta el momento en que sintieron que el bus estaba cayendo y de ahí en adelante no tiene más recuerdos del impacto.
Por su parte, Daniel Beltrán otro de los jóvenes lesionados comentó para Noticias RCN que en el instante solo alcanzó a escuchar cuando el profesor que los acompañaba les pidió que se sujetaran bien avisando del choque: “Olía mucho a quemado, como cuando huele así un freno o un closh. Adicionalmente, lo único que alcanzamos a escuchar fue que el profesor que iba encargado de nosotros nos dijo ‘chicos, agárrense’ y después se sintió el golpe de la colisión”, dijo Daniel.
El fue uno de los pocos que quedó inconsciente luego del impacto y aseguró ser testigo del sufrimiento de varios de sus compañeros: “Lo único que yo vi fue a muchos compañeros heridos y pensé que podía ayudarlos, pero de un momento a otro se me fueron las luces. Ya luego fue que me ayudaron a salir a mí”, aseguró.
Beltrán era amigo cercano de las cinco mujeres que fallecieron ese día, por lo que expresa su profundo dolor por la pérdida y el sufrimiento que muchos, incluido él tuvieron que pasar en los últimos días. Tras 48 horas de estar internado en un centro médico fue dado de alta y ya se encuentra pasando por su proceso de recuperación.
Familiares de Daya Fierro, otra de las jóvenes lesionadas que se encuentran aun internadas en los centraos asistenciales pro la gravedad de las heridas, contó desde lo que escucharon de su hija como se vivieron los momento previos al choque.
Mercedes Moreno contó que: “El señor venía muy rápido y la flota venía oliendo a quemado. Ella se acercó y le dijo al conductor que redujera la velocidad, el señor no quiso, cuando fue que ya perdió el control en la curva y se fue contra el barranco”.
De manera oficial las autoridades ni la empresa a la que pertenecía el bus de no han entregado las causas oficiales del accidente, pero de acuerdo con los testimonios recopilados, que coinciden en muchos aspectos, las principal causa podrían ser fallas mecánicas que el conductor no pudo mitigar.
El siniestro vial acabo con la vida de cinco jóvenes estudiantes de auxiliar de clínica veterinaria, todas entre los 18 y 22 años de edad, quienes fueron identificados como:
- María Alejandra Blanco Bueno, de 22 años.
- Karen Lorena Camero Galvis, de 18 años
- Valentina Cifuentes Rueda, de 19 años.
- Mileidy Katherin Galvis Moreno, de 20 años.
- Paula Andrea Camargo Marín, de 20 años.
El pasado 6 de octubre familiares de las victimas se reunieron en el lugar del hechos par realizar una velatón para rendir homenaje a las victimas.