En medio de la creciente polémica por el escándalo de corrupción en la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd), la directora del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República (Dapre), Laura Sarabia, desmintió categóricamente su supuesta participación en las diligencias ante la Corte Suprema de Justicia. La alta funcionaria, una de las figuras más cercanas al presidente Gustavo Petro, se pronunció públicamente tras la difusión de información que sugería que había rendido declaración ante la Sala de Instrucción, al asegurar que estas afirmaciones son falsas.
El escándalo, que involucra la contratación irregular de 40 carrotanques para llevar agua potable a las comunidades de La Guajira, puso bajo escrutinio a varias entidades del Gobierno. En este contexto, la Corte, en su investigación contra los congresistas Iván Name y Andrés Calle, solicitó testimonios de varias figuras del Gobierno, como el presidente Gustavo Petro y el ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo. Ambos, junto a otros funcionarios, entregaron declaraciones por escrito como parte del proceso judicial; sin embargo, la directora del Dapre aclaró que ella no fue parte de este procedimiento.
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A través de sus redes sociales, Laura Sarabia desmintió las versiones que circulaban en algunos medios: “Es falso que haya declarado ante la Corte Suprema en relación con el caso de la UNGRD. No tengo ninguna relación con este proceso y nunca he recibido citación alguna para comparecer ante las autoridades por este asunto”, señaló.
Este pronunciamiento fue realizado tras la circulación de una serie de noticias que implicaban su presunta declaración ante la Corte. Sarabia, que es pieza clave en el círculo cercano del mandatario, rechazó cualquier tipo de vinculación con las investigaciones en curso, al señalar que su nombre no estuvo relacionado con el caso que involucra a la entidad del Estado.
A pesar de que la congresista inicialmente compartió una captura de pantalla de la noticia que ella misma calificó como falsa, tras la eliminación de dicha nota, también decidió borrar la imagen, al dejar únicamente su mensaje. En este, aclaró que no está involucrada en el caso de corrupción que está siendo investigado.
Por su parte, el proceso judicial continúa avanzando, teniendo en cuanta la imputación de cargos por parte de la Fiscalía General de la Nación a Olmedo López, exdirector de la Ungrd, y al exsubdirector de manejo de desastres Sneyder Pinilla, que enfrentan acusaciones de concierto para delinquir agravado, peculado por apropiación agravado, interés indebido en la celebración de contratos, y falsedad en documento público y privado.
El escándalo, que se remonta a febrero de 2024, involucra la malversación de 46.800 millones de pesos destinados a la adquisición de los carrotanques para abastecer con agua a las zonas desérticas de La Guajira. Según las investigaciones de la Fiscalía, una porción considerable de estos fondos fue desviada: López habría obtenido $724 millones de pesos, mientras que Pinilla se habría apropiado de $342 millones.
La contratación irregular provocó un impacto significativo en la opinión pública, especialmente debido a la situación crítica de acceso a agua potable en La Guajira, una región que enfrenta constantes crisis humanitarias por la falta de recursos básicos. La corrupción en torno a la ejecución de estos contratos no solo afectó la imagen del Gobierno, sino que dejó en una posición delicada a varias instituciones que se encuentran bajo investigación.
El caso, aunque centrado en las figuras de López y Pinilla, ha ampliado su alcance hacia otras entidades del Estado, y cualquier posible involucramiento de funcionarios de alto nivel genera una atención mediática inmediata. En este sentido, la aclaración de Sarabia busca frenar la propagación de noticias falsas y mantener su nombre al margen de estas acusaciones.