En la tarde del lunes 7 de octubre de 2024, la congresista Paloma Valencia compartió un video a través de su cuenta de X en el que se refirió al reclutamiento de menores de edad por parte de las organizaciones terroristas en Colombia.
En su metraje, la senadora opositora comenzó por confirmar que el reclutamiento aún es una realidad en el país, incluso, se ha vuelto un arma de guerra por parte de este tipo de organizaciones que han aprovechado las políticas del Gobierno nacional para continuar con este flagelo.
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“El ELN, las disidencias de las Farc y el Clan del Golfo andan dedicados a reclutar niños gracias a la política del Gobierno nacional donde, como no se puede atacar ningún campamento donde haya niños, los niños se convirtieron en una presa deseada”, aseguró la senadora.
De acuerdo con la información que compartió la congresista, el objetivo de estas estructuras ilegales es incorporar niños de entre 8 y 14 años a sus filas con la excusa de que serán felices y tendrán una mejor vida y que “les van a dar de todo”.
En cuanto a las niñas, la senadora aseguró que “las convierten en esclavas sexuales con el mismo procedimiento de las Farc, que hoy niega que hayan hecho abortos de manera sistemática, para poder seguir teniendo esclavitud sexual en niñas menores de edad”.
Por otro lado, según la senadora, a los niños los vuelven carne de cañón, pues “los tienen al lado de los jefes guerrilleros para poder cumplir el deseo del Gobierno y es que no va a haber ningún bombardeo sobre los terroristas cuando estén rodeados de niños”.
Cuál es la postura del Gobierno
En junio de 2024, el ministro de Defensa, Iván Velásquez, se refirió a la controversia generada por la propuesta de algunos alcaldes del suroccidente del país de bombardear zonas controladas por disidencias de las Farc, una sugerencia con la que buscaban enfrentar con contundencia a grupos armados ilegales.
Pero, la respuesta del ministro dejó claras las restricciones respecto a estas tácticas, dado que si bien los bombardeos no están prohibidos como herramienta en la lucha contra grupos ilegales como las disidencias de las Farc, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Clan del Golfo, existe una prohibición específica en casos en los que se tenga la confirmación de presencia de menores de edad en los campamentos.
De acuerdo con el jefe de la cartera, esta postura está relacionada con la intención del Gobierno de evitar la muerte de niños y adolescentes reclutados de manera forzosa por estos grupos armados.
En ese momento, el ministro Velásquez explicó que la posición del Gobierno está basada en principios humanitarios y en la responsabilidad del Estado de proteger a los menores de edad, por lo que la política actual ha enfatizado el uso de la “mayor inteligencia” para determinar la ausencia de menores antes de autorizar cualquier bombardeo.
“Siempre le hemos dicho a las Fuerzas Militares que actúen con la mayor inteligencia, determinen la alta probabilidad de no presencia de menores antes de bombardear”, afirmó Velásquez.
Además, el ministro subrayó que esta restricción no implica que las Fuerzas Militares no puedan actuar en enfrentamientos directos contra estos grupos, dado que en situaciones de combate, la fuerza pública puede responder incluso si se enfrentan a menores armados, debido a la necesidad de defenderse.
El enfoque, insistió Velásquez, se basa en intentar rescatar a los menores involucrados en estos conflictos, buscando su recuperación y reintegración: “La limitación no es precisamente por los bombardeos, sino porque se matan a los menores, a los que, por el contrario, estamos buscando recuperar”, pues se espera reducir el impacto humanitario del conflicto armado.