El Gobierno nacional dio un importante paso para fortalecer la industria del acero en Colombia. El viernes 4 de octubre, el ministro de Comercio, Luis Carlos Reyes, anunció la entrada en vigor de un nuevo decreto que impone un arancel del 14% a las empresas que superen un límite anual de importación de 29.529 toneladas de barras de hierro o acero corrugadas. Esta decisión tiene como objetivo brindar mayor estabilidad financiera a la industria y proteger a las familias que dependen de ella.
El decreto, que estará vigente durante dos años, responde a una investigación solicitada por la industria siderúrgica. Dicha investigación reveló que las importaciones de barras de acero provenientes de la Comunidad Andina, en especial desde Perú, afectaron negativamente a la producción nacional. Durante el periodo de análisis, se evidenció un incremento del 19% en las importaciones, mientras que el precio por tonelada de estas barras importadas disminuyó cerca de un 7%, lo que generó un daño considerable en el mercado local.
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El ministro Reyes, en una declaración desde Barranquilla, explicó que la medida no solo busca proteger a la industria, también fomentar un pacto por el acero que permita mejorar la productividad del sector. “Le da estabilidad financiera a la industria y a las familias que dependen de esta industria. Por otro lado, es una apuesta a que esta industria aumente su productividad con el pacto por el acero”, afirmó Reyes.
Es importante destacar que este arancel está específicamente dirigido a las importaciones de barras de acero corrugadas provenientes de la Comunidad Andina. Reyes señaló que, aunque esta medida protege a la industria de las importaciones desleales provenientes de esta región, aún existen otras situaciones comerciales en proceso que podrían resultar en protecciones adicionales para el sector.
La firma del decreto se produce en un contexto en el que el Gobierno busca fortalecer la relación entre el Estado y el sector privado para impulsar la productividad de la industria colombiana. Según Reyes, este es solo el comienzo de un trabajo conjunto que tiene como finalidad llevar a la industria siderúrgica a un camino de mayor competitividad. “Esto es algo que empieza ya a proteger a la industria (y) a esas familias, para comenzar a llevar a esa industria en el país por ese camino mancomunado entre el Estado y el sector privado para mejorar la productividad de la industria”, concluyó.
Creación de una planta de acero
El gobierno del presidente Gustavo Petro está evaluando la posibilidad de imponer restricciones a las importaciones de acero desde China, como parte de un esfuerzo por proteger la industria siderúrgica colombiana. Entre las iniciativas en estudio, destaca la propuesta de construir una planta de aceros planos en el país. Este proyecto, que combinará inversión pública y privada, pretende aumentar la capacidad industrial de Colombia y reducir la dependencia de las importaciones. La planta no solo contribuiría al fortalecimiento de la producción local, también generaría empleo y dinamizaría la economía.
A principios de septiembre, el Gobierno ya había anunciado la creación de esta planta en colaboración con el sector privado, como parte de su estrategia para revitalizar la industria siderúrgica. La iniciativa apunta a generar una mayor autosuficiencia en la producción de acero, reducir costos de producción, y aumentar la capacidad competitiva de Colombia en el ámbito internacional.
Con estas medidas, el Gobierno de Petro busca garantizar que el sector siderúrgico pueda enfrentar la competencia global de manera más equitativa, a la vez que impulsa el desarrollo económico mediante la creación de empleo y la modernización de la infraestructura industrial del país. Esta estrategia, según analistas, podría ser clave para el crecimiento sostenido del sector en los próximos años, consolidando a Colombia como un actor relevante en la industria del acero en la región.