Asesinan al exsuegro de alias Chorizo, importante jefe criminal de banda delictiva en Floridablanca

Andrés Fabián Niño Soto, conocido como alias Chorizo, ha sido identificado como una figura central en una serie de violentos ajustes de cuentas en el área metropolitana de Bucaramanga.

Su nombre se ha vinculado a numerosos hechos delictivos, particularmente en Floridablanca, y su liberación reciente ha desatado una ola de violencia dirigida a sus allegados.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.

El viernes 4 de octubre, Luis Eduardo Celis Rojas, padrastro de la exnovia de ‘Chorizo’, fue asesinado en su domicilio en el barrio Caldas de Floridablanca.

Dos hombres armados llegaron a su vivienda, preguntaron por él y, al identificarlo, le dispararon en el tórax y el brazo. Aunque fue trasladado a la Clínica Foscal, falleció debido a la gravedad de las heridas.

Este asesinato se suma a la creciente ola de ataques contra personas cercanas a Niño Soto, la cual parece estar vinculada a una serie de retaliaciones contra su accionar delictivo.

Luis Eduardo Celis Rojas, que tenía antecedentes por tráfico de armas, violencia contra servidores públicos y fuga de presos, trabajaba actualmente en el sector del transporte.

Su muerte no es un caso aislado, sino parte de un patrón de violencia que ha afectado directamente a los allegados de ‘Chorizo’. Recientemente, también se intentó asesinar a Ingrid Juliana Plata Quintanilla, exnovia de ‘Chorizo’, que ya había recibido amenazas de este.

Los ataques no se han limitado solo a exparejas y allegados. Juan Camilo Niño Soto, hermano de alias ‘Chorizo’, también fue asesinado en el barrio Caldas de Floridablanca, lo cual refleja la continuidad de las represalias.

Además, el martes 3 de septiembre, un atentado en Piedecuesta dirigido a ‘Chorizo’ resultó en la muerte de un menor de 16 años, familiar de la pareja de ‘Chorizo’. El joven estaba en un automóvil junto a él en el momento del ataque, cuando dos individuos en motocicleta abrieron fuego, confundiendo al menor con su objetivo principal.

Estos hechos han dejado al menos tres familiares de ‘Chorizo’ muertos en un corto período de tiempo, generando una ola de violencia que se ha intensificado en la región.

Andrés Felipe Pinto Blanco, conocido como “Pipe”, fue asesinado en el barrio La Pedregosa de Bucaramanga tras una persecución que culminó con tres disparos, uno en el rostro y dos en el tórax.

El incidente ocurrió el viernes 20 de septiembre, y aunque logró llegar a una ambulancia, falleció en el camino hacia la clínica Chicamocha. Las autoridades han iniciado una investigación para esclarecer los hechos.

El joven, residente del barrio Caldas en Floridablanca, era amigo cercano de Juan Camilo Niño Soto, hermano de Andrés Fabián Niño Soto.

Este último está involucrado en un conflicto violento con la banda “Los del Sur”, liderada por alias “Poporro”, por el control territorial del tráfico de drogas. Según las autoridades, “Pipe” es la sexta víctima de esta disputa.

El día anterior al asesinato de “Pipe”, en el barrio Prados del Sur de Floridablanca, fueron asesinados Julio César Carvajal y un menor de edad. Carvajal, que tenía antecedentes policiales, pertenecía a la banda de “Chorizo” y murió en un enfrentamiento entre las dos bandas rivales.

Aunque fue capturado en julio de 2021 por el asesinato de Brayan Javier Banquet Mauri, alias Chorizo quedó en libertad debido al vencimiento de términos legales, lo que le permitió regresar a las calles y reestructurar una nueva organización delictiva.

Desde entonces, ‘Chorizo’ ha sido señalado como uno de los principales actores en los ajustes de cuentas en Bucaramanga y sus alrededores.

El general Henry Yesid Bello, comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, ha informado que, desde su liberación, Niño Soto ha estado involucrado en una serie de retaliaciones y ajustes de cuentas que han incrementado la violencia en la región.

La Policía, en coordinación con la Fiscalía General de la Nación, trabaja para reunir pruebas que permitan emitir una nueva orden de captura contra él, buscando frenar la escalada de violencia desatada tras su regreso al mundo del crimen.