La ministra de Justicia, Ángela María Buitrago, reafirmó su apoyo a la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), en medio de la controversia generada por las declaraciones del comisionado de Paz, Otty Patiño, quien sugirió el cierre de este tribunal.
La Justicia Especial para la Paz se convirtió en un tema recurrente en el debate público, debido a las tensiones con el Gobierno, en especial en las últimas semanas de septiembre de 2024, además con las declaraciones de Patiño y la disputa sobre la falta de inversión en proyectos restaurativos.
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Mientras el tribunal acusa al Gobierno de no transferir los fondos necesarios, este ha negado estas afirmaciones. En consecuencia, la ministra Buitrago, en una entrevista con El Espectador, manifestó la importancia de que la JEP emita sanciones, esenciales para la justicia transicional en Colombia.
Las defensas de la ministra de Justicia a la JEP
En el diálogo, Buitrago destacó que la JEP es una apuesta por la paz y que aún tiene tiempo para cumplir su mandato. “Ha contribuido al desarrollo de muchas investigaciones y tiene un compromiso con la articulación de un mandato de paz”, afirmó la ministra.
“Las propias víctimas han expresado en medios que no se sienten restauradas o reparadas. Es fundamental reconocer sus razonamientos para llegar a una reparación”, mencionó Buitrago. Sin embargo, enfatizó la necesidad de que el tribunal produzca decisiones y emita sanciones propias.
La ministra también subrayó la importancia de los proyectos restaurativos, indicando que deben llevarse a cabo para intentar restaurar a las víctimas. “Las propias víctimas han expresado en medios que no se sienten restauradas o reparadas. Es fundamental reconocer sus razonamientos para llegar a una reparación”, mencionó Buitrago.
Desde la última semana de septiembre, la controversia entre la JEP y el Gobierno ha escalado. El magistrado Roberto Vidal, presidente de ese tribunal, rechazó la idea de cerrar el tribunal, mientras que Patiño aclaró que esta no debería prolongarse más de 15 años, bajo el argumento de que en el país ya existen demasiadas instancias de justicia y que estas justicias transicionales deberían consolidarse en un macrotribunal.
Además, la Unidad de Víctimas ha explicado los problemas administrativos que han surgido para la creación de una subcuenta en el Fondo Colombia en Paz, destinada a financiar estos proyectos restaurativos. Esta situación ha llevado a Vidal a cuestionar al gobierno.
La ministra Buitrago, en su entrevista, reiteró que la JEP ha sido crucial en el esclarecimiento de muchos casos en el marco del conflicto armado y ha mantenido discusiones significativas con las víctimas en los macrocasos. No obstante, insistió en que es hora de que el tribunal emita sanciones, lo cual es vital para avanzar en la justicia transicional del país.
Las palabras de Otty Patiño En esos días, el comisionado para la Paz reveló que el Gobierno de Colombia está considerando la posibilidad de cerrar la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). Esta declaración se realizó durante un encuentro en Tumaco, Nariño, donde se reunieron delegaciones del Gobierno y de la Segunda Marquetalia junto con líderes de diversas organizaciones sociales.
En ese evento, también se anunció la fecha para el segundo ciclo de negociaciones con este grupo armado, cuyas acciones estarían debilitando las negociaciones.
Patiño explicó que el Gobierno está evaluando cómo evitar que la JEP “se prolongue en el tiempo”. También hizo mención de que ya existen varios procesos de justicia que no se han cerrado y que se está dialogando con la fiscal general, Luz Adriana Camargo, para fortalecer la justicia ordinaria y dotarla de cierta flexibilidad en el manejo territorial.
Además de la JEP, Patiño destacó que el Gobierno tiene abiertos nueve frentes de paz, incluyendo el de Comuneros del Sur en Nariño, el cual fue el foco del encuentro reciente. Otros frentes incluyen negociaciones con los herederos de Hernán Giraldo, conocidos como las Autodefensas Conquistadoras de la Sierra Nevada, y con el Ejército Gaitanista de Colombia, más conocido como el Clan del Golfo.
El consejero subrayó la importancia de estos frentes de trabajo y mencionó que el cierre del proceso de Justicia y Paz es igualmente relevante. Patiño sugirió que el cierre de la JEP podría ser propicio para organizaciones como el ELN, ya que es complicado generar nuevos procesos de justicia.