Las estaciones sísmicas distribuidas por Colombia son piezas esenciales para entender y mitigar los riesgos asociados a movimientos telúricos. El Servicio Geológico Colombiano (SGC) cuenta con un total de 339 estaciones sísmicas que cubren tanto el territorio nacional como las áreas alrededor de los volcanes activos. De estas, 206 conforman la Red Sísmica Nacional, ubicada estratégicamente en todo el país.
Además, el monitoreo constante de los volcanes activos es posible gracias a 133 estaciones sísmicas adicionales, que están integradas en tres observatorios vulcanológicos y sismológicos. Estas estaciones son cruciales para la vigilancia y prevención de desastres relacionados con actividades volcánicas.
Los datos generados por estas estaciones sísmicas permiten al SGC analizar en tiempo real los eventos sísmicos y volcánicos, proporcionando información fundamental para la toma de decisiones en materia de protección civil y planes de emergencia. Este sistema de monitoreo es vital para minimizar los impactos de los desastres naturales y proteger a la población colombiana.
El Servicio Geológico Colombiano (SGC), una entidad adscrita al Ministerio de Minas y Energía, se presenta como un pilar fundamental en el desarrollo social y económico de Colombia. Mediante investigaciones en geociencias aplicadas y básicas, la institución evalúa el potencial del subsuelo y monitorea amenazas de origen geológico.
El SGC, con más de un siglo de trayectoria, desempeña un rol esencial en la gestión del conocimiento geocientífico del país. Su labor comprende tanto la exploración de recursos, como la investigación y el control de elementos nucleares y radiactivos, siempre en sintonía con las políticas nacionales. Según informó esta entidad, parte de sus funciones incluyen el estudio continuo de riesgos y la implementación de medidas preventivas para mitigar desastres naturales en regiones vulnerables.