Fiscalía reactivó el caso de las ‘chuzadas’ del DAS tras década y media: un exdirector de la entidad será imputado

Andrés Peñate fue citado a responder por su presunta participación en uno de los escándalos de espionaje más graves en la historia reciente de Colombia, que involucró al actual presidente Gustavo Petro

Guardar
Bajo el liderazgo de la fiscal general, Luz Adriana Camargo, se espera avanzar en investigaciones que habían quedado estancadas - crédito Luisa González/Reuters y Colprensa
Bajo el liderazgo de la fiscal general, Luz Adriana Camargo, se espera avanzar en investigaciones que habían quedado estancadas - crédito Luisa González/Reuters y Colprensa

El emblemático caso de las interceptaciones ilegales del Departamento Administrativo de Seguridad (DAS), más conocido como el escándalo de las “chuzadas”, vuelve a ser el foco de atención de la justicia colombiana.

Bajo el liderazgo de Luz Adriana Camargo, la Fiscalía General de la Nación ha decidido retomar este controvertido proceso que habría permanecido en el olvido durante más de 15 años. Con la citación a imputación de cargos de Andrés Peñate, exdirector del DAS entre 2005 y 2007, el caso ha cobrado nueva vida y promete sacudir nuevamente el panorama político y judicial del país.

Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.

El próximo 3 de octubre, Peñate deberá presentarse ante la justicia para responder por cargos de concierto para delinquir agravado. La audiencia, que será virtual, se llevará a cabo ante el Tribunal Superior de Bogotá y marca un punto crucial en la reactivación del proceso.

Según la citación emitida por el magistrado Jairo José Agudelo, Peñate será cuestionado por su presunta participación en las interceptaciones ilegales que afectaron a más de 30 víctimas, entre ellas, políticos de la oposición, magistrados de la Corte Suprema de Justicia y periodistas.

Andrés Peñate, exdirector del DAS, fue citado a imputación de cargos por concierto para delinquir agravado - crédito Colprensa
Andrés Peñate, exdirector del DAS, fue citado a imputación de cargos por concierto para delinquir agravado - crédito Colprensa

El escándalo de las “chuzadas” sacudió a Colombia a mediados de los 2000 y derivó en la liquidación del DAS, una entidad que durante años fue vista como una de las más poderosas en términos de seguridad e inteligencia. Sin embargo, el uso indebido de sus facultades, al interceptar de manera ilegal comunicaciones de opositores al Gobierno, magistrados y periodistas, causó un fuerte revuelo.

El actual presidente de Colombia, Gustavo Petro, es una de las figuras clave entre las víctimas de las escuchas. En ese entonces, Petro era un senador opositor y su inclusión en la lista de personas interceptadas ilegalmente subraya la relevancia política del caso.

A pesar de las condenas de varios exfuncionarios, como María del Pilar Hurtado, exdirectora del DAS, que fue sentenciada a 14 años de prisión, y Enrique Ariza, entonces jefe de contrainteligencia, el caso parecía haber quedado en el olvido. Pero ahora, el caso ha sido desempolvado, y la citación a Andrés Peñate es solo la primera de varias acciones previstas para esclarecer todos los aspectos de este caso, incluyendo la posible implicación de altos funcionarios del gobierno de Álvaro Uribe, quien era presidente en el momento de los hechos.

Un capítulo oscuro para la seguridad en Colombia

El DAS fue liquidado tras el escándalo de espionaje que involucró a magistrados, políticos de oposición y periodistas- crédito Colprensa
El DAS fue liquidado tras el escándalo de espionaje que involucró a magistrados, políticos de oposición y periodistas- crédito Colprensa

El caso de las “chuzadas” no solo afectó a figuras públicas, sino que también puso en tela de juicio la integridad de las instituciones encargadas de velar por la seguridad nacional. Entre las víctimas de las interceptaciones ilegales se cuentan magistrados como Yesid Ramírez, Jaime Arrubla y el expresidente de la Corte Suprema, César Julio Valencia Copete, que tuvo varios enfrentamientos públicos con el expresidente Uribe. En su momento, el escándalo provocó una crisis en las relaciones entre el ejecutivo y la rama judicial, debilitando la confianza en las instituciones.

A medida que se reaviva el proceso, se ha conocido que algunos de los implicados, como William Romero, exsubdirector de fuentes humanas del DAS, han decidido colaborar con la justicia para obtener rebajas en sus condenas. Romero, junto con Martha Leal, exsubdirectora de operaciones, señaló a Peñate como una de las personas que dio las órdenes directas para llevar a cabo las interceptaciones ilegales. Según sus declaraciones, la operación estaba enfocada en recopilar información sobre opositores al Gobierno de Uribe y miembros de otras ramas del poder público.

El exsubdirector de fuentes humanas del DAS, William Romero, también confesó su participación en el escándalo y colaboró con la justicia - crédito Mariano Vimos/Colprensa
El exsubdirector de fuentes humanas del DAS, William Romero, también confesó su participación en el escándalo y colaboró con la justicia - crédito Mariano Vimos/Colprensa

El seguimiento a este proceso será clave para evaluar no solo el papel de los funcionarios implicados, sino el impacto que este tipo de acciones tiene sobre la confianza pública en las instituciones de seguridad y justicia en Colombia.

Guardar