Secretario de Seguridad de Medellín anuncia sanciones tras disturbios en el en partido Nacional vs. Junior

El secretario de Seguridad de Medellín, Manuel Villa Mejía, expresó su contundente rechazo a los actos violentos que ocurrieron durante el partido entre Atlético Nacional y Junior, celebrado en el estadio Atanasio Girardot.

En su cuenta de Twitter, Villa Mejía afirmó: “Rechazo total frente a lo ocurrido esta noche en el estadio durante el partido entre Nacional y Junior”, refiriéndose a los disturbios que obligaron a suspender el encuentro al minuto 54.

El incidente comenzó cuando se produjo una pelea entre hinchas en la tribuna norte, lo que llevó a la intervención inmediata de la Policía para controlar la situación.

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Según Villa Mejía, el estadio y sus alrededores fueron evacuados de manera ordenada por las autoridades. Además, se confirmó que un policía y 20 hinchas resultaron heridos, algunos de los cuales tuvieron que ser trasladados a centros médicos.

En su declaración, el secretario enfatizó que el fútbol debe ser una “fiesta en paz” y condenó a aquellos que usan el deporte como excusa para la violencia. “Quienes haciéndose pasar por hinchas ocasionan estas situaciones y se comportan por fuera de la ley, no son hinchas sino delincuentes y deben ser tratados como tal”, afirmó. También advirtió que habrá sanciones y se implementarán las medidas necesarias para prevenir este tipo de situaciones en el futuro.

Los hechos de violencia comenzaron poco después de que Nacional anotara su segundo gol, poniendo el marcador 2-0 a su favor. Los disturbios, según los reportes, habrían sido iniciados por hinchas del Junior que estaban ubicados en la parte alta de la tribuna norte.

Se estima que aproximadamente 300 seguidores del equipo barranquillero asistieron al encuentro. De acuerdo con la transmisión de Win Sports, los hinchas del Junior habrían traspasado la zona asignada para su barra, lo que desencadenó la reacción de los seguidores de Nacional.

Los enfrentamientos fueron tan intensos que el árbitro Nolberto Ararat decidió suspender el partido debido a la falta de garantías de seguridad para los jugadores, el cuerpo técnico y el público. Los equipos se vieron obligados a refugiarse en los camerinos mientras la Policía intervenía para restaurar el orden. Aunque el canal de televisión evitó mostrar imágenes de los enfrentamientos, se reportaron escenas de caos en las tribunas y fuera del estadio.

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En las redes sociales, circularon videos en los que se veía a hinchas corriendo por las tribunas en medio de los disturbios. También se reportaron casos de heridos apuñalados que fueron atendidos por la Cruz Roja. En el exterior del estadio, la situación no fue muy distinta, ya que se utilizaron gases lacrimógenos y bombas de estruendo para dispersar a los grupos involucrados en los disturbios.

La situación generó una fuerte reacción de las autoridades, quienes han prometido investigar los hechos y aplicar sanciones ejemplares a los responsables. Villa Mejía insistió en que quienes se comportan de manera violenta no tienen cabida en los estadios, y reiteró que las medidas tomadas serán estrictas para evitar que el fútbol se vea empañado por la violencia.