Denuncian varios casos de explotación infantil en una unidad residencial de El Poblado en Medellín

Un hombre de aproximadamente 46 años fue sorprendido en compañía de una menor de 16 años en el parqueadero de una unidad residencial ubicada en el sector de El Poblado, en Medellín.

Ante una denuncia que hicieron los residentes del conjunto, que notaron actividades sospechosas relacionadas con extranjeros y menores de edad, las autoridades sorprendieron al turista junto a la menor de edad.

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Esa diligencia dio lugar a una investigación relacionada con tres casos de presunta explotación infantil en la unidad residencial.

De acuerdo con las primeras pesquisas, un inmueble estaría siendo alquilado a través de la plataforma Airbnb por extranjeros, incluyendo al que fue sorprendido con una adolescente de 16 años.

La Secretaría de Seguridad de Medellín confirmó que se están recolectando datos para determinar la responsabilidad de la unidad residencial en estos supuestos casos de explotación sexual de menores. Hasta la fecha, se han reportado tres incidentes similares, en los cuales los propietarios del inmueble han notado la entrada de extranjeros acompañados de menores de edad.

El secretario de Seguridad y Convivencia de Medellín, Manuel Villa, explicó que la situación fue denunciada a través una llamada ciudadana a la línea de emergencias.

Pese a estar en compañía de una menor de edad, en lo que sería un presunto caso de explotación sexual, el extranjero sorprendido por las autoridades quedó en libertad pues no fue hallado cometiendo ningún delito en flagrancia.

Por su parte, la menor de edad fue trasladada y quedó en manos del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf) para que se le realizara el procedimiento de restablecimiento de derechos, de acuerdo con lo revelado por la emisora Blu Radio.

Aunque el extranjero no fue objeto de sanciones en su momento, las autoridades locales aseguraron que quedó bajo investigación. En caso de que se corrobore que ha cometido algún delito, especialmente relacionado con la explotación sexual, será perseguido y sancionado. Además, se evalúa la posibilidad de expulsarlo del país o no permitirle el ingreso en una próxima oportunidad.

“Se trataba de una menor de 16 años y un ciudadano extranjero de alrededor de 46 años. No se pudo constatar, según las mismas versiones de la menor y el material probatorio que se encontró en el lugar, que allí hubiera habido una relación sexual y que hubiera habido una transacción alrededor de una relación sexual”, explicó el funcionario.

El secretario de Seguridad y Convivencia, Manuel Mejía Villa, aseguró que la administración sigue adelantando diferentes estrategias para combatir la explotación sexual en Medellín.

“Venimos adelantando varias tareas. La primera de ellas una línea segura de WhatsApp que hemos lanzado para que la ciudadanía pueda denunciar de manera rápida, pero también de manera segura y eficiente cualquier caso en el que vea que hay un indicio de que allí se está cometiendo explotación sexual y comercial de niños, niñas y adolescentes. Esa línea es la 3245743635″, dijo.

Así mismo, aseguró que ya se han efectuado varios operativos y capturas gracias a las denuncias recibidas a través de ese canal.

“Lo segundo, creamos frente a ese delito priorizado un grupo, también especializado, de reacción exclusiva para atender el fenómeno. Está conformado por fiscales destacados, policía judicial destacada, el equipo de la policía de Infancia y Adolescencia, con personal de la Secretaría de Seguridad, con analistas exclusivos, en articulación con otras dependencias de la Alcaldía y otros organismos”, añadió.

En un tercer lugar informó que existe un programa llamado Parceras, para acompañar a las niñas, adolescentes y mueres en condiciones de vulnerabilidad.

Mejía dijo que esta inciativa está “dedicada única y exclusivamente a atender niñas y mujeres que están en contexto de vulnerabilidad, prostitución o explotación sexual y comercial. Lo que buscamos es tenderles una mano para acompañarlas a que de manera libre puedan construir un proyecto de vida”.