En Colombia comenzó torneo de fútbol en el que solo participan sacerdotes: compiten más de 500 religiosos de tres países

Más de quinientos religiosos participan de la novena edición de la ‘Copa de La Fe’, que irá hasta el 28 de septiembre

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Más de 500 religiosos participarán del torneo - crédito iStock
Más de 500 religiosos participarán del torneo - crédito iStock

Más de quinientos sacerdotes de 29 jurisdicciones colombianas, mexicanas y venezolanas asistieron a la apertura de la novena edición de la ‘Copa de La Fe’, en el estadio Federico Serrano Soto, de Riohacha.

ESte torneo es “el evento deportivo y de fraternidad sacerdotal más destacado de la Iglesia Católica colombiana”, de acuerdo con la Conferencia Episcopal.

Con representaciones de ‘la Vieja Mello’, como se le conoce a la patrona de La Guajira y la Santísima Virgen de los Remedios disfrutaron del evento que marcaba el inicio del torneo el lunes 23 de septiembre, que, gracias al esfuerzo de la Diócesis de Riohacha se extenderá hasta el día 28.

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La Conferencia Episcopal de Colombia celebró que se tratara de “la primera vez que este torneo se desarrolla en la región Caribe de Colombia, reconocida por su profunda riqueza humana, folclórica, turística y ancestral; y así se notó en este inicio. Pues al ritmo de sonidos y bailes tradicionales, cientos de fieles se unieron a los actos de apertura y vivieron junto a los sacerdotes la emoción del partido inaugural disputado entre el equipo anfitrión y el equipo de la Arquidiócesis de Villavicencio. Este primer encuentro dejó un resultado de 4-1, a favor del equipo llanero, integrado también por sacerdotes de la Arquidiócesis de Bogotá”.

Durante el torneo también se realizará una confesatón - crédito iStock
Durante el torneo también se realizará una confesatón - crédito iStock

Y es que, “a la apertura de esta fiesta de fe y fraternidad, también asistió monseñor Francisco Javier Múnera, arzobispo de Cartagena y presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia quien, además de alentar a su equipo, expresó su alegría al ver la participación de las comunidades en el evento. El prelado ratificó que esta es una oportunidad para fortalecer la unión no solo de los sacerdotes sino de toda la Iglesia, así como el entusiasmo misionero; para recoger la herencia de todos los misioneros y santos que evangelizaron estas tierras”.

El evento deportivo, un espacio para afianzar los lazos de amistad y fe entre las jurisdicciones que participen, pretende, además, brindar un espacio para que jóvenes de los colegios distritales de la capital del departamento de La Guajira se inspiren a seguir el camino del deporte y la iglesia, alejándose del mal sendero.

Representaciones de la Vieja Mello hicieron parte del evento inaugural - crédito Ginnette Riquelme / AP
Representaciones de la Vieja Mello hicieron parte del evento inaugural - crédito Ginnette Riquelme / AP

De ahí que, “el obispo anfitrión, monseñor Francisco Ceballos, diera a conocer su alegría por tener a Riohacha como sede de esta Copa de la Fe 2024 y recordara que es también una motivación para que la Iglesia se la juegue por la misión, como lo dice el lema elegido para este evento, pues durante la semana, además de las justas deportivas, los sacerdotes participarán en diferentes actividades misioneras con miembros de comunidades e instituciones de La Guajira para conocer más la realidad pastoral y cultural del territorio que los acoge. Además, vivirán jornadas de oración y serán parte de una gran “confesatón” que se llevará a cabo junto a la Catedral de Nuestra Señora de los Remedios de Riohacha”.

Aficionados le rezan a Juan Pablo II por su conexión con el deporte desde la juventud - crédito Juan Pablo II
Aficionados le rezan a Juan Pablo II por su conexión con el deporte desde la juventud - crédito Juan Pablo II

Oración para salir victorioso en un partido:

¡Oh querido San Juan Pablo!, desde tu juventud ya tenías esa pasión por el fútbol y conociste lo maravilloso que es este deporte, tu que promoviste los valores positivos de este gran deporte te pido que puedas interferir ante nuestro Señor Jesucristo por mi equipo para que gane el partido del día de hoy.

Quizás no será tan fácil ganar pero mi equipo deslumbra mucha pasión y ganas de darlo todo en el juego, además, con tu ayuda sé que podremos hacerlo, tu intercesión nos dará ese empuje que necesitamos para poder celebrar la victoria al terminar el partido. Pule las habilidades de cada miembro del equipo, que cada uno sea lleno de sabiduría, destreza y pueda rendir lo mejor en su área.

Te encomiendo mi equipo, bendito Juan Pablo II, te agradezco por tus oraciones y por estar pendiente de mi en cada paso que doy, gracias por escuchar mi petición hasta el final, confío en que tú intercedes ante el Padre celestial por nuestra victoria y logramos cumplir el objetivo del día de hoy, lleno eres de gracia. Amén.

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