Felipe, un niño de Granada, Antioquia, capturó la atención de miles de personas a través de las redes sociales, después de que una de sus clientas subiera un video en el que se puede apreciar su peculiar forma de vender empanadas, pues acompaña su labor con piropos.
Sin embargo, su historia va mucho más allá de un solo video, pues el menor de edad no solo destaca por su carisma, sino también por su dedicación y amor hacia su abuela, debido a que trabaja con ella desde hace tiempo, con el fin de colaborarle con los ingresos para el hogar.
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Felipe relató que desde hace varios años acompañó a su abuela en la venta de empanadas en la plaza del pueblo. De acuerdo con lo que relató durante una entrevista con el medio local MiOriente, su abuela no solo vende empanadas, sino también boletas para rifas, en lo que él le empezó a ayudar y se sintió muy cómodo en la labor.
Sin embargo, las autoridades de familia se percataron de que el menor estaba trabajando por lo que le indicaron a su abuela que, debido a su edad, no debía vender rifas. A pesar de esta restricción, Felipe continuó ayudando a su abuela.
“Empecé a ofrecer las boletas, después de un tiempo la Comisaría de Familia le dijo a la abuela que no le podía seguir ayudando a vender boletas, entonces como yo no hice caso a lo que me dijeron seguí vendiendo y me cogieron y me llevaron 4 días para un hogar de paso donde me preguntaron que si mi abuela me obligaba a ayudarle, yo les dije que no, que yo le ayudaba a mi abuela porque yo quería para no quedarme quieto en el puesto mientras que ella vendía las empanadas y las boletas”, declaró el pequeño.
Al niño le permitieron regresar con su abuela y seguir ayudándola. Fue entonces cuando Felipe decidió enfocarse en la venta de empanadas, no solo en el pueblo, sino también en los buses que transitan entre San Carlos y Medellín, donde su amabilidad y carisma pronto lo hicieron destacar.
“Como de costumbre trato bien a la gente, entonces una vez me subí como lo normal a vender en un bus que iba para Medellín y estaba una mona grabando con su celular. Me le acerqué y le ofrecí las empanadas, ella me dijo que si le echaba un piropo me compraba las empanadas, y de ahí comencé a vender empanadas acompañadas de lindos piropos”, explicó el niño que se hizo viral en redes sociales.
El video que grabó esta joven marcó un punto de cambio en la estrategia de ventas que estaba implementando el niño que se viralizó a través de las plataformas digitales como Tiktok, Instagram, Facebook y X. Desde entonces, Felipe comenzó a ofrecer empanadas acompañadas de piropos, lo que le ha permitido ganar una gran popularidad y destacar más en su labor.
Con sus piropos, el niño no solo apoya a su abuela con el negocio, sino que también se convirtió en otro ejemplo de que la viralización en redes puede llegar a ayudar a toda una familia. En medio de su diálogo con el medio local, resaltó que la bondad y el trabajo en equipo son valores fundamentales en su familia.
Con cada frase y cada venta, Felipe sigue conquistando corazones mientras ayuda a salir adelante a su familia, por lo que el medio también resaltó sus redes sociales para aquellos que deseen seguir su historia y apoyarlo. En Instagram lo encuentran bajo el nombre Andrés Felipe Piropos y sus empanadas o @pipepiropooriginal1708, y en TikTok pueden buscarlo como Felipe el original piropos.