Dos menores resultaron intoxicadas en Santa Marta con medicamentos psiquiátricos: estaban haciendo peligroso reto de TikTok

Hay preocupación en Santa Marta, después de que las autoridades reportaran sobre un grave hecho dentro de una institución educativa en el que resultados intoxicadas dos estudiantes, al parecer, por ingerir medicamentos de uso psiquiátrico.

Según se conoció, las menores estarían replicando un peligroso reto que se ha popularizado en redes sociales y que consiste en consumir pastillas de uso psiquiátrico y, una vez ingeridas, resistir el mayor tiempo sin dormir.

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La abuela de una de las menores afectadas relató que su nieta ingirió dos pastillas, lo que le provocó una convulsión y la mantiene internada en un centro médico desde el viernes.

“Los médicos no nos han explicado el procedimiento. A ella le suministraron dos pastillas, la niña convulsionó y cuando llegamos al hospital no le hicieron lavado porque había pasado mucho tiempo”, indicó la abuela en su testimonio recolectado por La W.

Por su parte, Sandra Muñoz, secretaria de educación del distrito de Santa Marta, se pronunció sobre el incidente ocurrido en el Liceo del Norte. “Frente al hecho ocurrido el pasado viernes donde se vieron involucradas dos jóvenes, hecho en que presuntamente consumieron sustancias psicoactivas y que al momento no tenemos conocimiento de la clase de pastillas que les causó afectaciones a su salud, los directivos docentes activaron la ruta de atención”, declaró Muñoz.

Además, la Secretaria de Educación informó que se notificó a la Policía de Infancia y Adolescencia y se hizo un llamado a los padres de familia de las menores involucradas para que estén atentos a este tipo de situaciones.

Una de las menores permanece recluida en un centro asistencial, mientras las autoridades continúan investigando el caso para determinar las circunstancias exactas y prevenir futuros incidentes similares. “Según información que nos dieron las directivas de la institución, de inmediato, apenas se presentó la situación, se activó el plan de atención de emergencia y las menores fueron atendidas oportunamente”, comentó la funcionaria.

El uso indebido del clonazepam, un medicamento del grupo de las benzodiazepinas, está generando preocupación en varios países de América Latina. Este fenómeno, conocido como el “reto clonazepam” o “El que se duerma último gana”, consiste en que los participantes ingieren el fármaco, que tiene propiedades ansiolíticas y sedantes, con el objetivo de mantenerse despiertos más tiempo que sus compañeros. La falta de supervisión en el consumo de este medicamento ha llevado a graves consecuencias para la salud de los adolescentes involucrados.

El clonazepam es un medicamento psicotrópico que se utiliza comúnmente para tratar la ansiedad, el insomnio y otros trastornos afectivos. Sus efectos incluyen la estabilización del estado de ánimo a corto plazo, así como propiedades hipnóticas, anticonvulsivas, amnésicas y miorrelajantes. Sin embargo, su uso prolongado y sin control médico puede llevar a la dependencia y a efectos secundarios severos.

Cuando se consume clonazepam en dosis altas, los usuarios pueden experimentar amnesia a corto o largo plazo, dependiendo de la cantidad ingerida. Además, la combinación de este medicamento con otras drogas puede resultar fatal. La dependencia que genera el clonazepam hace que su suspensión repentina provoque efectos adversos graves, como alucinaciones, ataques convulsivos, trastornos cardíacos e incluso la muerte.

El “reto clonazepam” ha sido replicado por decenas de adolescentes en la región, quienes buscan ganar el juego viendo cómo sus compañeros caen dormidos. Este comportamiento irresponsable y peligroso pone en riesgo la vida de los jóvenes, quienes no son conscientes de las consecuencias que puede tener el abuso de este medicamento.

Médicos y pacientes que han utilizado clonazepam han compartido sus experiencias sobre lo difícil que puede ser dejar de tomarlo cuando se ha consumido en dosis elevadas. La dependencia que genera este fármaco es un problema serio, y su uso debe ser estrictamente supervisado por profesionales de la salud para evitar complicaciones.