Durante una entrevista que concedió el viceministro de Relaciones Exteriores, Jorge Rojas, al medio internacional Europa Press, durante el fin de semana, el alto funcionario del Gobierno Petro se refirió a la crisis humanitaria en la frontera con Panamá por cuenta de los migrantes que se la juega para llegar a Estados Unidos, atravesando la cruel selva del Darién.
Rojas sostuvo que era imposible cerrar la frontera con el hermano país, donde se han superado récords en los dos últimos años respecto a la cantidad de personas que cruzan la inhóspita zona para lograr el “sueño americano”.
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”Es imposible hablar de un cierre de la frontera (...) Cooperar, prevenir, disuadir... Estos son verbos rectores de la política migratoria. Pero se nos puede desbordar. Por Colombia transitan medio millón de personas cada año para llegar a Norteamérica”, afirmó Rojas.
Recordó también que la mayoría seres humanos que pasan por el también denominado tapón del Darién son de origen venezolano, y que tres millones de ciudadanos de ese país han llegado a Colombia durante la última década y actualmente son 13 millones las personas que se encuentran en la frontera.
“Es una situación bastante compleja y buscamos fórmulas para regularizar su situación y que puedan regresar de forma voluntaria”, insistió.
Crisis electoral en Venezuela
En la entrevista con el medio de comunicación europeo, el vicecanciller anunció que hasta inicios del próximo año, el Gobierno del presidente, Gustavo Petro, esperará para fijar su nueva posición con respecto a la crisis que se desató en el hermano país ante la señalada reelección fraudulenta del jefe del régimen, Nicolás Maduro.
Si bien el Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano se dio como ganador al sátrapa, sin conocerse aún las actas de las votaciones, que se realizaron el pasado 28 de julio, la posición diplomática colombiana se ha abstenido tanto de reconocer o no a Maduro como mandatario, pero esta posición podría cambiar una vez concluya el periodo establecido por la Constitución venezolana para que se lleve a cabo la posesión presidencial.
“Esperaremos hasta el 10 de enero porque es la fecha en la que se dará la transición. Hay un margen de incertidumbre y queremos facilitar el diálogo político”, indicó el vicecanciller en la sede de la Casa América, en Madrid (España).
Rojas dejó entrever que insistirán en que el régimen de Maduro inicie una salida paulatina del poder al reconocer la convocatoria lograda entre María Corina Machado y Edmundo González, ahora exiliado en el país europeo.
“Venezuela va a tener que reconocer que hay un actor político que se llama oposición, con todas sus diversidades, y que hay un actor político que se llama Gobierno o chavismo, con todas sus características”, aseveró.
También reveló que estaban a la espera de la posesión presidencial de Claudia Sheinbaum en México el próximo 1° de octubre, para ahondar sobre las decisiones sobre la crisis electoral en la hermana República junto con Brasil, ya que han cerrado filas con la misma directriz de una “transición democrática”.
“Hay tres países de América Latina trabajando para buscar una solución democrática en Venezuela, y esos tres países se van a encontrar en el marco de la posesión de la presidenta. Ese es un momento importante para revisar este asunto”, anunció.
Y retomó su argumento de que se insistirá en el diálogo y los acuerdos entre la oposición venezolana y el chavismo, pese a que en el Parlamento Europeo, y otras instancias internacionales, han reconocido como presidente Edmundo González.
“Queremos lograr el diálogo en Venezuela y estamos listos para facilitarlo trabajando con todas las partes involucradas en esta situación. Para ello trabajamos también con Brasil y México; reclamamos lo básico, que haya garantías para la oposición y que haya respeto a los Derechos Humanos”, afirmó.