Para los amantes del arte, la historia y la cultura llega una de las exposiciones más importante que tendrá la capital colombiana el 20 de septiembre de 2024.
Se trata de Miguel Ángel Vivo, una experiencia que llevará al público a un mundo mágico a través de once salas con diversa tecnología, paredes backlight led, reproducciones en escala real de las esculturas más importantes del artista italiano, entre ellas, el David, el Moisés, La Piedad del Vaticano, El Baco, entre otras.
Miguel Ángel Vivo estará disponible al público de todas las edades, de domingo a domingo, en el Centro Comercial Mallplaza NQS, en Bogotá. Los precios de las boletas están entre $16.000 a $38.000.
Ahora puede seguirnos en Facebook y en nuestro WhatsApp Channel.
“Es la posibilidad de llevarle a la sociedad una experiencia incomparable, llena de magia, pedagogía y sensaciones que despiertan todos los sentidos por un precio incluyente, al alcance de todos”, asegura Raúl Araújo, director de Arriba el Telón Latinoamérica.
Además, el público podrá divertirse y compartir su experiencia en redes sociales ya que cada espacio está diseñado para generar contenido de fotos o video para Tiktok e Instagram, debido a la tecnología innovadora y el juego de imágenes, con luces y colores alucinantes que jamás se ha visto antes en Colombia.
“Bogotá es una de las principales capitales de Latinoamérica y, como tal, el traer Miguel Ángel Vivo es una forma de conectar con una audiencia diversa, fomentar el intercambio cultural y contribuir al desarrollo del panorama artístico, educativo, de entretenimiento y económico y además generar empleos, ya que el personal que trabaja el montaje en campo, es colombiano”, agrega Araujo.
La productora Arriba El Colombia (AET) en asociación con Aurea Exhibitions Holanda BV, es la responsable del impresionante montaje que se presentará al público Bogotano con obras icónicas del que es considerado uno de los más talentosos artistas en la historia de la humanidad, el maestro del renacimiento que revolucionó una era.
Esta productora también ha presentado con mucho éxito montajes reconocidos mundialmente como ‘Bodies’ Cuerpos Humanos Reales en 2020. Además, se destaca por su experiencia en la promoción del arte y la cultura en la región, con presencia en Chile, Argentina, Uruguay, Perú, Bolivia, Colombia, México y Ecuador, habiendo presentado en Latino América más de 150 exhibiciones acogiendo más de seis millones de visitantes.
Cómo será el recorrido
- El David, la escultura más famosa del mundo de casi 5 metros y medio.
- La Piedad, consideradas la más delicada y tierna escultura de todos los tiempos.
- La sala inmersiva que reproduce la capilla Sixtina, obra que tomó cuatro años de trabajo diario y cambió el arte occidental, a la cual se ingresa y se sale a través de los túneles del “Infierno” y del “Cielo”.
- Recreaciones escenográficas.
- Sala de proyección con pantalla envolvente.
- Sala de Nubes (súper instagrameable/tiktokeable)
- Zona de Merchandising.
- Innumerables puestas escénicas ideales para generar videos y tomarse fotografías.
La historia del David de Miguel Ángel
Aquí la historia de la realización del David de Miguel Ángel compartida por National Geographic.
La historia del David de Miguel Ángel empezó cuarenta años antes de que el artista pusiera manos en la obra. En 1463, las autoridades de la Obra de la catedral de Santa María del Fiore, en Florencia, encargaron al escultor Agostino di Duccio una gran estatua que debía colocarse en el exterior de la catedral, sobre los contrafuertes.
Ahí figuraría junto a las de otros dos profetas que habían realizado medio siglo antes Donatello y Nanni di Banco, con la diferencia de que mientras éstas eran de terracota, la de Di Duccio sería de mármol.
El artista acudió a las canteras de Carrara para seleccionar un bloque de mármol adecuado, e incluso lo desbastó parcialmente in situ a fin de aligerarlo antes de su traslado a Florencia. Sin embargo, tres años después renunció a la tarea y abandonó en el taller de la catedral la mole de mármol a medio trabajar.
Esta muestra se quedó ahí durante casi cuarenta años, sin que ninguno de los escultores, hasta una docena, a los que se ofreció la piedra –que era conocida en la ciudad con el nombre de El Gigante– se viera capaz de esculpir en ella cualquier figura, grande o pequeña.
En 1501, los responsables de la catedral florentina decidieron retomar el proyecto y consultaron al efecto a varios artistas, entre ellos Leonardo da Vinci, sobre la posibilidad de crear una obra de arte a partir del desfigurado mármol de casiseis metros de altura. Miguel Ángel Buonarroti, un joven escultor de 26 años, fue el único que aseguró que podría hacerlo sin necesidad de añadir más piedra al bloque existente.
El David de Miguel Ángel es un hombre atlético en la plenitud de su vida, no el adolescente que representaban Verrocchio y Donatello. La estatua permaneció en la plaza de la Señoría hasta que en 1873 se decidió protegerla de las inclemencias del tiempo, por lo que fue trasladada a la Galería de la Academia, donde aún permanece. La réplica a tamaño real que se colocó en el emplazamiento original en 1910 recuerda a los florentinos lo cuál fue y sigue siendo el símbolo más emblemático de su ciudad.